Una sola vez, y no más
Mi historia no fue tan reciente, a los meses de ocurrir la escribí un día aburrido como para no olvidarme de su existencia. Le cambié y agregué detalles, pero en general esta es:
Estaba en un carrete fome de día jueves, con gente que conocía poco, con huevones que nunca había visto en mi vida, y con música mala y trago que no podía tomar , por hacermelas de chofer. Me quería ir hace horas, pero tenía un amigo dando vueltas por ahí que me comprometí a pasar a dejar a su casa si o si (porque vive a la chucha del mundo).
Para no alargar la historia, este amigo estaba tan tomado que se quedó en la casa, así que terminé saliendo solo , liberandome por fin del carrete. Cuando iba saliendo se me acerca la dueña de casa (ex-compañera/amiga) que me dice “Oye Benja, espera” y me pide si puedo pasar a dejar a su primo, porque estaba lloviendo, y vive lejos, y es muy pendejo para andar solo (19 , pero nuestro grupo era de 22-23 en ese entonces) , sus viejos no están así que no lo pueden pasar a buscar, es tarde, y todo el drama. Le dije que si , para hacerme el buena onda. Lo espero 40 minutos sentado en el auto, escuchando radio se me pasó volando, pero ya me estaba apunto de ir cuando llegó el mino. No era el mino perfecto, pero me mató cada detalle. Fue como de película: Su pelo castaño desordenado mojado , su sonrisa de oreja a oreja, una polera blanca mojada con una chaqueta de cuero ajustada, unos jeans que dejaban notar sus muslos, un cuerpo que uno podía mirar por horas, ojos café claro-oscuro. No era EL mino, pero cumplía con todo lo que en mi cabeza es “per-fec-to”, me quedé boca abierta. Pero como no soy huevón no me hice ilusiones, pensé “no te pases rollos, está léjos de tu alcance, ubícate” , y traté de pasar piola. “Oye, estai bien wn?” me dice, porque evidentemente no pasé piola… pero quedó en talla de que me estaba quedando dormido esperándolo y toda la huevada. Vamos en el auto, camino a su casa que también quedaba a la cresta del mundo, y me empieza a contar lo típico: Que estudia, de donde era, y que hacía por la vida. Yo lo miraba de reojo, y en cada roja que me tocaba no podía dejar de mirarle su entrepierna. Tenía una pierna levantada, bien extendida en el asiento de copiloto, y se le marcaba su paquete de forma maravillosa. Me contó que estaba bajoneado, porque terminó con su polola hace unos 6 meses, y me sentí tan mierda por estar joteandolo que tuve que tirarle flores “Oye , si no vale la pena lamentarse por relaciones, con tu pinta y personalidad vas a encontrar a varias personas”. Hubo un silencio incómodo , y después se rió. Noté de reojo que se había sonrojado y lo encontré lo más tierno de la vida. Como un huevón ya grande se sonroja por algo así?. Me pidió disculpas por gastar bencina, me reí, hablamos más de música , y sin darnos cuenta llegamos al frente de su casa. “Te pasaste wn, vale” -me dice mientras se baja, y se queda un rato con la puerta abierta, mirando. Lo miro de vuelta, como tratando de grabar una imagen mental de él, pensé “a este mino no lo veo más, tengo que recordar esto”. En mi mente fueron 5 minutos que nos quedamos mirando, pero en realidad debió ser menos jaja. Rompió el silencio después de un rato “Oye, si quieres puedes pasar y tomarte algo caliente, si igual te desvié harto del camino. Aprovecha de que se te seque la ropa wn” –
Huevonamente me negé, como 3 veces, y a la cuarta vez que insistió acepté. Su casa era la raja, muy ABC1. Estábamos en el comedor y me sirve un café, lo notó y está sin la chaqueta y sus brazos y espalda me terminan de matar. Que mino más rico. Me enfoco en mi café, le digo que es bonito su comedor y se rie “Esta es el comedor de servicio no más po wn”. Me sentí muy C3. Me termino el café, le hago preguntas huevonas de su casa, y sin darme cuenta lo noto y está sin su polera, secándose el pelo con una toalla. Si me mató sin chaqueta ahora yo estaba por los suelos. Me pongo nervioso y le dije que me tenía que ir , que mil gracias, y todo. “Sécate un poco wn” me dice, llevándome la toalla a la cabeza; bruto y tierno. No se que hacer y entre la confusión del momento lo único que atino a hacer es dejarme. Por fin puedo ver y lo noto cerca mio , con sus manos al rededor de mi cuello, con la toalla cubriéndome la cabeza, y con su sonrisa de mierda. “Perdón” me dijo, cuando notó que estaba serio, y se alejó. “No, no… no , no, está bien” Le digo con toda la estupidez del mundo. Nuevamente cruzamos la mirada por minutos. Reacciono, llevo mi manos a su cadera, y me acerco a su cara lo más próximo a sus labios sin darle un beso, como esperando que confirme, esperando que el complete esos últimos milímetros que nos separan. Siento su respiración en mi rostro, siento su olor puro, siento su mirada más intensa que nunca. Pero todo lo que obtuve fue un “Que te pasa weón??!” y un empujón. “Chucha, chucha, disculpa” le digo, mientras salgo rajado de la casa, sin mirarlo a la cara, y me meto a mi auto.
Me quedé ahí un buen rato, lamentándome por cagar un buen momento, y por ser tan mierda. Veo que se acerca , y pienso que me iba a echar , llamar a carabineros, o no se, me pasé ene rollos. Prendo el motor, y grito “Voy saliendo , voy”. Me pega en el vidrio , y lo bajo , como pensando “Ya, que me diga sus últimas chuchadas, si igual las cagué, filo”. Mete su brazo por la ventana, sube el seguro , y abre la puerta, tan rápido y brusco que pienso que me va a pegar. Sin darme tiempo para decirle que se calme o defenderme , ya está dentro de mi auto y me toma de la mano. Quedé helado, y no se que decir, nos quedamos asi un rato. “Sorry por confundirte, estaba webiando contigo… no pensé ibas a prender tan rápido” me dice, mirando hacía afuera, como ya deja de llover. Vuelve a mirarme y dice “Si quería… tú sabi… si quería, pero terminé hace poco una relación con esta mina… como te dije, y ya me equivoqué con ella y no se si volvamos, y todavía no estoy claro en nada, soy muy pendejo para estas weas”. Sigo sin saber que decir, pero atino “Yo puedo ser tu error, te puedes equivocar conmigo” – le dije, amariconadamente y casi riéndome de lo cursi. Pero funcionó, porque el mino me plantó un beso al segundo , y por fin pude sentir sus labios, su sabor, su cuerpo tocando el mio. Apenas podía respirar mientras me besaba, me muerde el labio y siento un dolor rico. Me asfixia su furor, noto que su mano me abre la camisa y me está tocando mi abdomen, sus dedos dan vueltas en los pelitos del ombligo, me río entre beso y beso. No puedo interrumpirlo y decirle algo más antes de que noto que se está tocando arriba de sus jeans. Su miembro se ve a full y lo toca como si estuviera a punto de reventar. Aprovecho la euforia y llevo mi mano a su paquete. Lo siento duro y caliente, abro sus jeans en tiempo record, y llevo mis labios directo a sus boxers negros. Él no quería perder tiempo en eso y los baja rápidamente, ahora tengo su pene a full frente mio, y lo tomo con mi mano. Me quedo paralizado, como hipnotizado, todavía no creyendo lo que pasa. Lo siento en mi boca, palpitar y crecer un poco más. Trato de seguir lo que pasa en las pornos, chupar hasta el fondo, pero no puedo. Me concentro en su cabeza, beso cada vena que palpita, me concentro en su sabor, en sentir todo, mi manos acarician torso, y casi me corro al escuchar sus sonidos de placer. Sus “Aaah” guturales que viene de lo más profundo de su pecho, de los que yo era el responsable. Me calientan sus muslos tensos, su respiración agitada, sus abdominales fluctuantes por la agitación, y sus manos que atraviesan mi pelo, hasta llegar a mi cuello. Cada cierto tiempo busco su mirada, pero estaba con su cabeza inclinada hacía atrás. “Me voy cortado wn, me voy” me dice entre gemidos arqueando su cabeza hacía mi, y con una mirada cómplice y su mano firme me deja su miembro dentro de mi boca, y entiendo su intención. Botó un buen chorro de semen en mi boca , un poco en mi labio, y un poco cae por mi mentón. Me limpio, no estaba acostumbrado al sabor, pero con la calentura lo busco y quiero todo para mi. Vuelvo a metermelo a la boca, semi-duro, todavía palpitando. Mientras escucho los últimos restos de su orgasmo se termina de subir sus jeans, abre la puerta, y cuando pienso que hasta aquí llegó todo cuando me dice “Enseñame como se mete wn” . Volvemos a su comedor “de servicio”, por la entrada posterior, esta vez entrando sin soltar nuestros labios, sin dejar de comernos, nos sentamos en el sillón de su living. “Aquí? seguro? ” – le dije, entre la poca cordura que me quedaba. “Si wn, no están mis viejos , sin gritar no ma’. Sus jeans vuelan, los mios también. Mi camisa perdió unos botones, y su polera volvió a desaparecer. Me pasa un condón que saca de un mueble, (recuerdo que debímos usar antes para el sexo oral, pero ya pasó). Estoy con boxers , me los bajo mientras me inclino hacía él… él desnudo en el sillón, todavía semi-duro, como que despertará en cualquier momento. Se abre de piernas y yo boto pre-seminal de solo mirarlo. “Así wn?” me dice, mientras se escupe un dedo y se lo mete. “Conshesumadre” digo mientras se mete el segundo dedo, mientras empieza a volver a recuperar su erección, y la mia está apunto de explotar. Sin saber que hacer para ayudar empiezo a masturbame, simplemente mirando como se dilata desesperadamente por mi. Mi cuerpo tiembla mientras me adentro al suyo, él tiene el control mientras me toma de mis cadernas, y se mueve buscando placer, adentrando mi pico cada vez más dentro suyo. “No duele tanto wn, dale” me dice, y con esas palabras bastaron para que comenzara a bombear , salir y sacar, mientras afirmaba sus piernas con mis brazos, y esperaba sentir todo su cuerpo, sudando frente a mi, cada vez más profundo, cada vez más intenso. Por fin noto placer real en su rostro, y comienzo más fuerte, y más rápido hasta noto dolor en su expresión. Me gusta esa sensación, lo siento vulnerable, lo siento mio. Se corrió sin avisar, chorreando su pecho y el mio. Bastó eso para que me fuera también, dentro suyo, con condón supuse que no importaba. Me quedé dentro de él, mientras nuestras respiraciones se sincronizaban, nuestro sudor se compartia, y besaba por útima vez sus labios. “Te quiero probar” dijo, sacándome el condón y chupándome los últimos rastros. Los hombres no tenemos orgasmos múltiples, pero juro que sentí eso. Fue como volver a correrme sentir su lengua recorrer mi cuerpo. Terminamos. Me ofreció ducha. Me ofreció quedarme (eran ya como las 5:30) , y rechacé lo último, me tenía que ir porque el viernes tengo clases a las 10:15. “Gracias por pasar a dejarme ” me dijo sonriendo, y él me dio su último beso. No fue con calentura. Me subí a mi auto. Todavía el asiento mojado. Ya no llovía. Me fui.
Y no más— quedó ahí. Volví a preguntarle a mi amiga sobre su primo, volví a ir a los mismos carretes fomes , volví a juntarme con el mismo grupo, pero nada. Me lo encontré un par de veces más adelante, meses después, y fue todo buena onda, pero como si nada. Supongo si fui un error. O nunca fue más que una calentura y oportunidad del momento. Pero quiero recordar la experiencia. Espero no sea lo último que me pase en la vida.
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