Entrenando con el colágeno

Entrenando para un triatlón, conocí a Carlos, un chico de 18 años recién cumplidos, que iba a competir por la liga de los jóvenes junto a dos compañeros de clase. Yo entrenaba en la misma cancha con ellos. Un día yo estaba mirando a los nuevos, que eran todos muy guapos, y en eso el cabrito se cae. Yo, muy responsable, lo fui a ayudar, me puse a conversar con él y lo llevé a enfermería. Le dije que era entrenador y que trabajaba ahí. Ahí comencé a conversar y a entrar más en confianza. Le di mi número por si había alguna duda en su desempeño, para poder ayudar y que mejorara en la competencia. Esperé unos días y no me hablaba, hasta que un día X vi un mensaje de él y me pidió si ayudaba en el entrenamiento con sus colegas de clase. Obvio le dije que sí, y nos juntamos en algunas ocasiones en la cancha: charlamos, entrenaron y así por varios días.
Cuando entramos en más confianza, les invité a los tres a mi departamento «para celebrar su desempeño» en su entrenamiento. Al principio habían dudas, pero aceptaron. En mi depa yo tengo algunas máquinas de ejercicio, y también tengo una camilla para masajes y otras cosas. Se me ocurrió decirles si querían entrenar un poco o si querían un masajito, pero al final solo entrenaron, comieron algo y se fueron.
Pero ya habían ido al departamento, entonces había más confianza. Otro día, creo que fue viernes o sábado, Carlos me habla y me dice que quiere entrenar solo. Obvio le dije que sí, lo invité para conversar con él y ver qué quería entrenar. Llegó con short muy ajustado, una parca y su bolso. Le recomendé que primero se dejara hacer un masaje para que ayudara a soltar los músculos y mejorara en su técnica. Con dudas aceptó. Le dije que se quedara cómodo en la camilla. Para mi sorpresa, no tenía nada puesto bajo la parca; estaba sin polera ni nada, así que quedó en puro short. Tenía un cuerpo muy lindo, blanquito, flaco, apenas marcado y lampiño. Me encantan los cuerpos así.
Se quedó con el short y se acostó, y le comienzo a masajear la espalda y las piernas. Les juro que se me hacía agua la boca por comer ese culito redondito y paradito. Muy caliente me tenía. Lo bueno es que yo estaba solo en short y sin nada más abajo.
En eso, Carlos me dice que el short le aprieta mucho y si se lo puede bajar. Obvio le dije que sí, y le ayudé. Y pasé a llevar la ropa interior: unos boxers blancos. Se puso rojo, yo le dije que así estaría más cómodo, que así el masaje ayuda más, y aceptó.
Le comencé a masajear el culo y las piernas. Yo ya con el pene full parado, pero no se notaba tanto. Igual, de la calentura del momento no aguanto y le pasé los dedos en su rajita. Él, con miedo, salta, pero no me dice nada y abrió más las piernas. En eso me emociono y me animo a chupar su culo.
Con miedo pensé que no aceptaría o que se enojaría, y para mi sorpresa se pone a gemir muy rico. Para ese momento ya no hablaba nadie, solo nos dejamos llevar. Me saqué el short, le acerqué mi verga a su boca y él, con toda confianza, me la chupa mientras yo le metía los dedos en el culo.
Carlos era extremadamente blanco, de esos que se le ven las venas, con ojos café claro, pestañas largas, tetillas rosaditas y una verga grande pero no ancha, y un culo hermoso con su hoyito muy rosadito.
Después de unos minutos de estar jugando con su colita, le pongo un poco de lubricante. Me coloco en la orilla de la camilla, ya lo tenía tipo en cuatro apoyado, y le meto la verga de una. Él salta y se queja de dolor. Le dije que aguantara, y solo se escuchaban sus gemidos muy ricos. Ahí seguí bombeando, dándole con todo. Cuando ya se lo había metido de una, lo culié fuerte hasta venirme en su colita. Le saqué el pico y chorreaba el semen de su hoyo. Nos bañamos y, por la hora, se fue.
Después lo encontraba y, cuando había gente, se hacía el loco, pero lo invitaba mucho a mi departamento y follábamos rico.
Carlos ahora está muy lindo, ya está muy definido, sigue igual de blanquito, pero ya no es el flaquito que me culié.
2 Comentarios
Anónimo
noviembre 2, 2025 a las 4:10 amy ya no cogen?
Anónimo
noviembre 3, 2025 a las 11:29 pmHola
Este es mi correo electrónico: maximogonzalez746@gmail.com