El club: Twink Pelirrojo
Bueno les quería contar mi relato, espero que les guste, el otro día me encontraba aburrido en la casa y me llegó una notificación por un grupo de Telegram en donde hacían fiestas para adultos. Ofrecían un club social en donde podías compartir en distintas áreas, como zonas de cruising, bar, karaoke, y videojuegos. El tema es que siempre he sido un poco prejuicioso y ese tipo de lugares me daban vergüenza.
Al llegar, me recibió un chico con bata de baño muy amable y saludando como si nos conociéramos se siempre, se me hizo raro pero a la vez me dio confianza. Entré al lugar y habían tres personas más. Uno sentado y dos de pie, eran como anfitriones. Todos en jockstrap. La verdad, ahí me empecé a asustar un poco, pero a la vez me estaba excitando. Me parecía divertido y arriesgado. Pagué mi entrada y me dieron una bolsa para que me quitara toda la ropa y la guardará (incluyendo el celular) pero no en un baño o camerino. Era allí delante de todo el mundo. Tenía que quedar en interiores, zapatos y medias. Me parecía bastante extraño pero normas son normas. Me quité la ropa, la guardé en el bolso que me dieron. Me preguntaron cuál era mi rol, que en este caso es activo, y me dieron una pulsera que identificaba mi preferencia con el color verde y tenia un número para registrar mis consumos.
Al entrar pude ver que habían hombres como te los pudieses imaginar. Altos, bajos, delgados, peludos, depilados. ositos, dadys, de todas las formas que pudieses imaginar.
Atravesé una cortina encontré el bar. Necesitaba un poco de valor líquido. Así que me pedí un mojito y empecé a conversar con el chico de la barra. Estaba en interiores, se le marcaba todo, pecho velludo, muy simpático. No sabía muy bien qué hacer o que decir, así que solo me dio por conversar mucho de cualquier wea. Luego él me dijo que saliera y conociera a los chicos, que la gente allí era buena onda.
Así que me armé de valor y salí. Tenía mi trago en la mano y me daba grandes sorbos. Como les dije anteriormente, necesitaba valor líquido. Empecé a observar la situación, cómo se relacionaban, si primero conversaban o de una empezaban a tocarse. Había un mueble rojo gigante en donde habían varias personas tocándose a la vez. Se hacían sexo oral, se besaban, estaban masturbándose. Y a mí me parecía un poco subreal lo que estaba viendo.
Cuando me vine a dar cuenta, me tomé el mojito más rápido de lo que esperaba. Supongo que los nervios no me dejaron controlar el consumo, así que tuve que ir por otro. Entré de nuevo, pedí uno, y sin esperar mucho, volví a salir. Pero espera. Mientras salía, en la parte del cardioque, vi a un chico, pelirrojo, twink, bailando canciones un poco afeminado. Nunca me han gustado los chicos delgados, mucho menos sin pelos. Pero él tenía algo que llamaba mi atención. Aparte de tener un culo enorme y blanco, se movía muy sexy. Pero seguí mi paso hacia afuera, a seguir viendo lo que estaba observando. Se había formado una gran orgía, pero honestamente no quería participar, honestamente tenía miedo. Recuerdo que entre una de las cosas que vi, era un tipo… muy musculoso, como de gimnasio. Y otro hombre, como de unos 40 años, haciéndole sexo oral. Eso me prendió mucho. Y cuando vine a ver, con una mano tenía el trago, y con la otra estaba sobando mi verga qué ya estaba dura y comenzaba a mojar mi bóxer de precum. A mi lado, se paró alguien. Mi corazón empezó a latir fuertemente, pero no sabía cómo voltear. Así que empecé a ver de reojo, y era el twink de adentro, sentí alivio y excitación. La verdad me calentó mucho verlo allí. Pero a la vez sentía un poco de miedo. El chico estiró su mano, y empezó a sobar mi verga por encima del bóxer. Eso me prendió muchísimo. Así que le puse la mano en el hombro, e hice que se agachara para que me hiciera un buen sexo oral. Y obedeció, se agachó e introdujo toda mi verga en la boca, de una vez. Era muy tragón, y me miraba hacia arriba mientras se la tragaba. Estaba muy excitado y no paraba de follarle su boca. Cuando vine a ver, estaba envuelto en miradas. Muchos estaban observando cómo ese chico me hacía sexo oral. Y la verdad, empecé a disfrutarlo. Lo tomé de la cabeza, y empecé a follarle en la boca más duro y más rápido. Cuando hacía arcadas, lo retiraba un poco. Pero enseguida se reincorporaba, y seguía mamando. Les puedo decir que es de las mejores mamadas que me han dado en la vida. Él estaba sentado en una especie de taurete. En donde luego, con mi mano, le dirigí para que se acostara un poco. Vi que había un bowl con bastantes condones. Así que me puse uno. Había lubricante. Le eché bastante lubricante en el culo. Y se lo empecé a meter de una vez allí, su culo estaba muy cerrado y calentito apretaba muy rico y gemia mientras yo lo embestia como un toro. Y me decía no pares por favor y eso me volvía loco. Por un momento dejó de importarme toda la gente que estaba mirando. Yo estaba en lo mío. Y empecé a follarle el culo muy rico. Nunca he sido muy de BDSM, ni nada de esas cosas. Pero me dio por darle unas muy buenas nalgada que le dejaron sus nalgas bien rojas. Él solo soltaba grandes gemidos. Y yo solo quería follarlo mucho hasta llenar ese condon de leche . Estuve dándole por un buen rato (me cuesta acabar con el condon) . Hasta que llegó el tipo musculoso de antes, se paró el frente de nosotros, y le puso su verga en la boca. Me tomó a mí del cuello y me plantó un beso mientras yo tenia al twink ensartado y el tenia su verga en la boca del twink.
Avisen si quieren que les siga contando de mi experiencia ese día y de otras días, porque volví algunas veces más y una ha sido más rica que la otra.
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