El compañero de colegio engañado – Parte II: Clase de natación

Hola otra vez. Hace unos días les conté sobre mi experiencia con mi compañero de colegio Kevin, y sobre como lo que empezó como una broma por redes sociales, terminó en una relación que duró casi dos años.

En esta ocasión, les contaré una de mis experiencias con Kevin. Esto ocurrió en el colegio, en clase de natación. Como les comenté en el relato anterior, mi colegio tenía piscina, por lo que era obligación en cierto momento del año tener que meternos a la piscina en ed. Física (lo que a mi me encantaba, porque me gusta nadar y porque podía ver a a mis compañeros en traje de baño o boxer si se les olvidaba el traje de baño).

La cosa es que justo fue uno de estos jueves donde nos tocaba natación a los hombres, mientras las mujeres estaban en fútbol. Yo fascinados en el agua, y Kevin, mi Kevin, también en el agua, luciendo su boxer blanco que se puso a propósito, sabiendo que si se le “quedaba” el traje de baño, tendría que meterse así. Lo más rico, era que se le traslucía todo con ese boxer blanco, entonces yo estaba pegado a ese pedazo que se dejaba entrever.

Nadamos un rato, haciendo lo que el profe nos iba diciendo. Cuando terminó la clase, el profe nos dijo que teníamos 20 minutos libres en el agua. Pero yo me salí para ir al camarín a mear. Acto seguido, veo que Kevin aparece en el baño, con su boxer blanco mojado y su pene qué prácticamente se veía todo.
Cuando entró, cerró la puerta con pestillo y solo me dijo

-Kevin: te gusta como se me ven?
-Yo: sii, no podía parar de mirarte en la piscina.
-Kevin: por que crees que vine con estos? Sabía que mi wachito lo miraría.
-Yo: pero si me vas a tentar, mínimo que me dejes comer.
-Kevin: sírvase.

Me termina de decir eso, mientras se agarraba el paquete y yo ni tonto, me fui directo a ese pene. Empecé a pasarle la lengua sobre el boxer, hasta que descaradamente se lo saqué, dejando ese pedazo justo en mi cara. Lo agarré y me lo metí a la boca, yo fascinado mamando esa tula delgada pero cabezona, que soltaba rico precum, que yo me tragaba con gusto.

Estuve unos minutos mamando, cuando me separa, me baja el traje de baño, y me pone en cuatro sobre las bancas. Me tira un escupito y empezó a intentar meterlo. Como tenía una tula cabezona, costaba que entrara, pero yo estaba tan caliente que no demoró mucho. Empezó a moverse lento, yo estaba en el cielo, no podía creer que que mi Kevin me estaba culiando en el colegio, lo que siempre había sido una fantasía. En eso Kevin me levanta, yo apoyándome en la pared, él me culiaba con muchas ganas, mientras me tapaba la boca para que no se escucharan mis gemidos.

Lo más rico era escuchar y sentir sus ricas bolas chocando en mi culo. En eso escuchamos que alguien intentaba abrir la puerta, pero como estaba con pestillo no se podía. Él se asustó y me dijo “dejémoslo hasta aquí” pero yo quería que mi hombre disfrutara hasta el final, así que le dije que terminara, él con una sonrisa coqueta empezó a moverse otra vez y empezó a pajiarme. Estábamos en el cielo, hasta que siento que empezó a moverse más rápido y me dice “me voy”, yo fascinado siento como me manda una emvestida fuerte, metiéndomelo hasta el fondo, por poco no metió las bolas, mientras siento los chorros de lechita llenándome, lo que me calentó mucho y todo esto mientras él seguía pajiandome, esto hizo que yo también me fuera cortado, llenando la pared de los camarines de mi semen.

Él me la sacó, me fui a un baño a botar la lechita y limpiarme, en lo que escuchamos que venían nuestros compañeros hablando y caminando hacia los camarines, a lo que agarramos la ropa y nos vestimos rápido, pero en esa rapidez, él se puso mi traje de baño y yo sus boxer. Quitamos el pestillo e hicimos como si hubiéramos llegado recién al camarín. Nuestros compañeros entraron y todo normal. Nos fuimos a duchar y todos cambiándose, hasta que un amigo (Joaquin) se acerca y me dice

-Joaquin: no andabas con traje de baño negro?
-Yo: si, por qué?
-Joaquin: y por qué ahora andas con boxer blanco cómo los del Kevin?

No sabía como justificarme, pero solo atiné a decir que yo igual andaba con boxer blanco debajo del traje de baño. Mi amigo pareció creerme. Pero si eso es verdad o no, quien sabe.

Esa fue mi experiencia con Kevin en el colegio, pero para la otra les contaré sobre el cumpleaños del Kevin y su primo…