El ladrón de autos
Buenas, hace un tiempo atrás les conté algunas historias (el gitano y el exhibicionista) y en esta oportunidad les comentaré lo que sucedió por la calles de Santiago hace unos 3, 4 meses aprox.
Para efectos de este relato mi nombre es Alex tengo 33 años, soy de Santiago, contextura normal, moreno y de gym no soy la verdad.
Esto ocurrió en Diciembre del año pasado, cuando en una calle cerca del centro de Santiago alrededor de las 01 AM, dando una vuelta en auto veo un vehículo rojo que se encuentra estacionado y el conductor arriba del auto. En esas calles siempre hay webeo, por lo que ver a alguien estacionado, era de suponer que andaba en esa también.
El conductor un tipo de unos 30 y tantos, delgado, con una barba cuidada y el pelo medio enrulado.
Me estaciono delante de él y me quedo arriba del auto, mirando o esperando más bien cuál sería el siguiente movimiento. Pasado unos minutos, el hombre se baja, usaba una polera manga corta y un short, dio unas vueltas alrededor del auto, se acercó al auto mío, miró guardando su distancia y luego vuelve a subir a su auto, yo por mi parte repito sus movimientos, por lo que decido bajar de mi auto y acercarme al suyo lentamente, llegando a la altura de la puerta del copiloto me detengo y lo quedo mirando, en eso desde su asiento le quita el seguro al auto y con eso entiendo que debo subir.
Entro al auto, le digo que onda y me dice acá viendo y su mano se la lleva a su verga, yo me acomodo y empiezo con mi mano a tocarlo y ya estaba medio dura. En un movimiento rápido, se baja el short y con su mano la lleva a mi cabeza y me hace bajar directo a mamar, yo muy obediente comienzo a mamar dando mi mejor esfuerzo para obtener mi premio, cada vez que podía me la tragaba entera y él solo se retorcía de placer, a ratos me daba unas palmadas en la espalda que con eso entendía que debía parar, ya que alguien venía pasando cerca (a veces autos y a veces gente caminando). Luego volvía a mi labor y seguía chupando, él me preguntaba si me gustaba y yo le decía que sí, entonces me respondía que me la coma toda, luego de unos 30 min de estar mamando y con mis manos agarradas en sus muslos, me afirma bien de la cabeza, hundiendo mi cabeza a su pico y él en un efecto de placer gime mientras sus chorros de leche se van directo a mi garganta, yo sin saber que hacer, retengo toda su leche en mi boca, mientras él se sube el pantalón yo abro la puerta del auto y botó todo su semen a la calle. No existió mayor conversación, no compartimos Instagram, nunca nos dijimos nombres y simplemente ambos nos fuimos de ahí.
Pasaron unos días, en los que vuelvo al lugar cerca de la misma hora y esta vez no había nadie, me quedo estacionado, esperando si alguien llegaba en auto o pasaba caminando cerca, dando una señal de buscar webeo, pero nada, al pasar unos 30 min, un auto rojo pasa al lado de mi auto, la cara se me hace conocida, se detiene y luego sigue avanzando, para estacionarse ahora el adelante mío. Yo con dudas, bajo del auto y me acerco al auto para ver quién era, ya estando más cerca, me doy cuenta que es el mismo de la otra vez, él le quita el seguro al auto, yo me subo y me pregunta que en qué estaba, le digo que viendo que sale y él me dice que pasó a ver qué onda. De presencia no se definirlo, pero les aseguro que no se viste como flaite ni tampoco muy de jeans o camisa, es más estilo verano, con su short y polera, no es cortante para hablar, al contrario, ya en esta segunda vez, me caía bien, sin siquiera conocerlo mucho.
Seguido de esas preguntas de inicio me dice:
Teni’ que tener cuidado por acá, ya que de noche los locos vienen a robar por acá, anoche no más asaltaron a un colita que andaba webeando, el loco se bajó de su auto y weones en moto lo encierran, le quitan las llaves del auto y cago no más.
Yo agradecido del dato que me acaba de dar, le digo no tenía idea. Si la noche es pa’ los vivos.
Yo la verdad que tanta conversación no busco a esa hora, pero el dato era bueno y la forma en que me hablaba era simpática, así que me olvidé de cuáles eran mis intenciones por las que me subí al auto y nos pusimos a conversar un rato, me dijo que se llamaba Carlos y después de un rato de hablar, de cómo acá robaban, que este mundo es de los vivos, etc. me pregunta:
Carlos: y tú en caso que alguien te quiera robar que harías?
Yo: le tiro el auto encima
Carlos: en serio harías eso? Te pitearías a un wn que te quiera robar?
Yo: Sii
Me dice, yo ando preparado en caso de cualquier cosa, tengo un palo debajo del asiento con un clavo en la punta, cualquier cosa (lo saca del asiento y me lo muestra) yo no pensando mal ni nada, le digo buena, preparado igual por cualquier cosa, me dice si po y si el wn se pica a choro, ando con esto en la guantera, en eso abre la guantera y veo una pistola (pero él solo abre y cierra la guantera, no hace nada más).
Yo la verdad es que no me asusté, ya que le encontré lógica a lo que dijo, de estar preparado por cualquier cosa, así que seguimos conversando, después ya nos pusimos caliente y aprovechando que la calle, en el transcurso de la conversación, se había llenado un poco de autos, pero ahora volvía a estar vacía, acerqué mi mano a su verga y comencé a bajar hasta llegar a su pantalón, ahí con mis manos le bajo su ropa hasta la rodilla y me lo meto a la boca, mamándoselo rico, su verga estaba depilada, su tamaño de unos 16 o 17 cm, y lo tiene muy rico, así comienzo a chupar, esta vez me atreví a más y como pude, traté de bajar hasta sus bolas y ahí le pasaba mi lengua, le gustaba ya que cada vez que lo hacía se abría más de piernas como tratando de que mi lengua abarcara cada vez más terreno.
Después seguí mamando y él con su mano ayudaba a que me la metiera más al fondo, su mano empieza a acercarse a mi culo y dándome unos agarrones fuertes mientras yo seguía chupando. Me gusta que me den agarrones o palmadas, así que me prendí más y alternaba mamones y al otro rato, con una mano lo pajeaba mientras con mi boca seguía chupando, escuchaba solo sus quejidos de que le gustaba lo que le hacía y uno que otro comentario «que rico weon». Al rato, vuelve a hundirme la cara y su cuerpo se contrae, levantado un poco la pelvis, hasta que sus chorros caen en mi boca, yo trato de salir de la posición con su leche aún en mi boca, pero con sus manos en su cabeza, seguido de unos golpes me dice, trágatelos, quiero que te los saborees, yo no me hago problema y comienzo a tragar y a dejarle esa cabeza bien limpia, vuelvo a mi puesto de copiloto, me queda mirando y me sonríe seguida de una palmada en la cara me dice chupai rico weon.
Me pregunta si me voy para la casa y le digo que iba a ver si es que salía algo más, me dice
Carlos: Noo, tú te vai pa’ tu casa no más, ya te marqué así que nada de andar weando’ con otros weones.
Yo me río y le digo lo voy a pensar, me dice si po’ si no acá mismo te quito el auto. Yo entre medio nervioso y riendo le digo ¿ahhh si? ¿tú me quitarías el auto? Y me dice nooo jajajaja o sea a otros si, pero tú me caíste bien así que no.
Y yo medio preocupado le digo como a otros si 😨 y me responde:
-Carlos: es que no te vai’ a espantar si po
-Yo: nooo tranqui dime.
-Carlos: Es que yo me dedico a esto me responde
-Yo: a esto ¿que?
-Carlos: a esto po’ a robar autos, nos juntamos de noche con otros locos y nos vamos Pa’ las autopistas y les quitamos los autos a los weones. No sé cual fue mi cara, porque en ese momento se ríe y me dice, pero tranqui que tú estai asegurao’ conmigo
Yo para ser honesto como que no le creí, así que le seguí el juego no más, además el weón es rico, tiene rico pico, es simpático, así que mucho miedo no me dio, por lo que luego de esas dos veces, tuvimos varios otros encuentros, pero siempre en su auto o en el mío y donde si me fue contando más detalles de sus hazañas.
🔥 ÚNETE A NUESTROS CANALES DE TELEGRAM 🔥
Recibe los mejores relatos directamente en tu celular
IR AL CANAL DE TELEGRAM
1 Comentario
Victor
noviembre 4, 2024 a las 10:24 pmEstá buena la historia, sigue contando que más pasó con el ladrón rico.