La visita de mi tío
Me llamo Nicolás y esta historia pasó hace unos cinco años cuando yo tenía 19 años con mi tío que en ese tiempo tenía 48 años. Yo mido 1,74 de contextura delgada y un pene normal de unos 17 cm.
Yo hace un tiempo miraba a mi tío con una especie de fantasía, siempre tuvimos muucha confianza, lo que hizo que fuéramos muy cercanos. Cuando salí del colegio me fui a otra ciudad para entrar a la universidad, así que dejé de verlo tan seguido como antes, aunque siempre hablábamos.
Un día me llama para decirme que tenía que ir a la ciudad en donde yo vivía porque tenía que hacer unos trámites y se demoraría todo el día, y quería ver si se podía quedar a dormir en mi departamento (vivía solo en ese tiempo). Yo trabajaba todos los fines de semana, pero justo coincidió que cuando él tenía que ir yo no trabajaba y tampoco tenía clases, así que no hubo mayores problemas.
Recuerdo que ese día estuvo muy bonito y él llegó a mi departamento como a las 6 de la tarde. Cuando llegó comimos algo y estuvimos conversando un rato, cuando ya estaba atardeciendo le ofrecí un cigarro, así que nos fuimos los dos al balcón justo cuando estaba atardeciendo, mi departamento tenía una vista muy bonita, así que la escena era perfecta.
Nos quedamos en el balcón por un rato hasta que me empieza a contar que hace tiempo no pasaba nada en la casa y que ese día andaba muy caliente y que se iría a la pieza un rato (el estaba separado hace un par de años, pero tenía una relación con otra persona).
Pasaron unos 30 minutos cuando sale de la pieza y me invita nuevamente a fumar, así que partimos al balcón nuevamente, estuvimos mucho rato conversando cuando de repente me abraza y me da un beso muy apasionado. De pronto me aleja y me pide disculpas, yo le dije que no se preocupara, nos quedamos mirando un rato y yo lo beso.
Fue uno de los mejores besos que había dado en un largo tiempo, cuando nos separamos lo invité a la pieza a lo cual él me siguió y nos continuamos besando, seguíamos de pie al lado de la cama hasta que me dice que quería hacerme suyo esa noche, que él sabía que yo siempre había querido que eso pasara, a lo cual lo quedé mirando y le dije que haríamos todo lo que él quisiera.
Nos empezamos a tocar mientras nos besábamos (si, nos besamos por mucho tiempo y fue la mejor experiencia que he tenido), hasta que yo me arrodillo frente a su pene y le bajé el pantalón y su bóxer a lo que sale su pene de un salto y yo abrí unos ojos muy grandes al ver tal belleza, era un pene muy grande (21 cm aprox) de forma cónica.
Con una sonrisa en mi cara le empiezo a lamer su cabeza la que ya estaba soltando ese líquido muy rico, el cual saboreé con muchas ganas. Poco a poco empecé a metérmelo más y más a la boca hasta que tenía un poco más de la mitad dentro y de fondo escuchaba sus gemidos y decía que le encantaba como se lo estaba haciendo, al paso de un rato me agarra del pelo y me empieza a violar la boca metiéndome todo ese pene dentro, traté de aguantar lo que más pude, pero a ratos las arcadas eran casi imposibles de evitar.
Se lo estuve chupando unos 15 minutos hasta que me dice que me lo quería meter, pero quería hacerlo sin condón, a lo cual acepté con mucho gusto. Me tiró a la cama, yo me puse en cuatro y de pronto empiezo a sentir su lengua en mi ano, lo hacía de una manera espectacular, luego me metió un dedo, luego el otro hasta que yo no aguanté y le dije que quería su pene dentro mio, pero que lo hiciera lento porque hace mucho tiempo no pasaba nada con nadie, a lo cual él con una sonrisa me dice que no me preocupe, que solo disfrute lo que se venía.
Él se paró y empezó a frotar la cabeza de su pene por mi ano, hasta que la metió, empezó a meterme su pene muy lento hasta que llegó a la mitad y de pronto solo sentí un gran ardor en mi ano, el cual se fue luego de unos instantes y desde ese momento solo quedaba disfrutar. Estuvimos en esa posición unos 10 minutos cuando me dice que me quería ver la cara, así que cambiamos de posición y me colocó pies al hombro y siguió metiéndomelo cada vez más fuerte hasta que me dice que ya se iba a ir, a lo que yo le dije que no lo saque, que quería toda su leche dentro mío, en ese momento su mirada cambió y empezó a follarme más fuerte hasta que unos segundos después escuché sus gemidos y como dejaba toda su leche dentro mío.
Me abrazó y nos dimos un beso sin que él me sacara su pene hasta que del cansancio ambos nos acostamos, yo le di la espalda y él me abrazó por detrás y me dijo al oído que le había encantado lo que había pasado esa noche y que cuando yo quisiera lo podíamos repetir.
Él a los meses terminó con su pareja y siempre buscaba una excusa para tener que ir a la ciudad en donde yo vivo para nuestros encuentros secretos, que con el paso del tiempo cada vez se ponen mejores.
Espero les haya gustado y si quieren les puedo contar alguna otra historia.
🔥 ÚNETE A NUESTROS CANALES DE TELEGRAM 🔥
Recibe los mejores relatos directamente en tu celular
IR AL CANAL DE TELEGRAM
1 Comentario
Ignacio
mayo 16, 2025 a las 3:37 pmOtra historiaaa