Mi amigo y su hermano

Me llamo David tengo 18 años y este es mi relato con mi amigo y su hermano. Javier es mi mejor amigo de toda la vida. Ambos tenemos la misma edad, somos vecinos y siempre he ido a su casa a estarme todo el día.

Entre nosotros siempre ha habido confianza por eso, lo he visto desnudo en muchas ocasiones, ya que se iba a duchar y al regresar se cambiaba en frente de mi. Javier juega futbol, es blanco, cabello castaño claro y lampiño o sea que no tiene ningún tipo de bello corporal.

Ha tenido muchas novias y siempre me cuenta como se las coge, la confianza obsesivamente clara tanto que un día sin más me pidió que nos hiciéramos una paja entre amigos. Y así fue, yo lo masturbaba a él y él a mi, el se vino en mi mano y luego hizo que me los tragara y eso se repitió muchas veces, incluso a veces solemos ver pelis en su cuarto y me suele hacer que lo toque mientras tanto. Un día llegue a su casa después de la escuela como siempre acostumbraba y Alex, su hermano, me abrió la puerta y me dijo

— Javo no está, anda con Rose (su novia).

Eso es algo normal, igual siempre entro y me meto a su cuarto a esperarlo. Puse una peli y luego entra Alex con la toalla en su cintura y sin camisa. (Acababa de bañarse) Entro a robarle un boxer a Javo ya que no tenía limpios, nunca lo había visto con deseo. Pero verlo con su cuerpo blanco mojado la V que se marcaba en su abdomen de atleta y el pequeño bulto que se me marcaba hizo que me diera una pequeña erección, haciendo que me pusiera la almohada de Javo entre mi entrepierna.

Alex pareció notar lo que pasaba y en lugar de llevarse el boxer para su cuarto y vestirse allá, lo hizo frente mío, se quitó la toalla y por fin pude ver lo que salía de ahí, una tremenda verga incluso más grande que la de Javo pero igual de lampiña. Yo no pude disimular que le miraba la verga y él que estaba erecto en lugar de ponerse el boxer se me queda viendo y se toquetea mientras me dice

— No me la mires mucho que se me para más.

Yo que estaba medio paralizado por el shock solo solté una risa nerviosa y Alex se me acerca y me dice

— Ya no te aguantes las ganas y ven a mamármela.

Me puse de rodillas y me la metí en la boca y se la comencé a chupar todita, pero en eso escuchamos un ruido y me dice

— Voy a cerrar la puerta del cuarto, la señora Maria (la sirvienta) estaba abajo y puede subir.

Cerro la puerta del cuarto de su hermano, me hizo ponerme de pie, comenzó a quitarme la ropa y luego me comenzó a besar el cuello, el pecho y luego la boca a diferencia de lo que hacía con Javo, ya que Javo y yo solo nos tocabamos, pero nunca nos habíamos besado ni nunca se la había mamado.

Luego Alex bajo hasta llegar a mi pene y comenzó a darme él una buena chupada, lo hacía mejor que yo, luego se puso de pie y me puso a mi hacer lo mismo, me agarraba la cabeza y hacia que le hiciera garganta profunda y sin avisarme se vino en mi boca y su leche se fue directo en la garganta. Alex se rió y me dijo.

— Javo me contó que ustedes se hacían una paja entre amigos y me entró el deseo de mamartela y de que me la mamaras. Espero que cuando Javo no este en la casa te quites las ganas conmigo.

Y así fue, cuando Javo estaba en la casa él y yo haciamos lo nuestro y a pesar que lo disfrutaba, prefería las veces que no estaba para comerme con Alex.

Era increíble hacer eso con los dos hermanos, pero lo mejor fue cuando por fin hicimos un trio, pero eso es para la parte dos.