Mi primera experiencia en el cruising

Hola. Tengo 29, soy de Santiago, y esto me pasó a fines del 2019, después de haber salido de una relación relativamente tóxica. Como es clásico, después de mucho tiempo en pareja monogámica, andaba buscando hueveo como si se fuera a acabar el mundo. Fue en un foro donde empecé a leer sobre el cruising y lugares donde la gente lo practicaba en Santiago, pero me sonaba un poco a fantasía aún.

Llevaba un año y medio yendo a gimnasio, y por el cambio de rutinas, ahora aprovechaba de ir en la mañana, ducharme e irme directo a la pega. Fue ahí cuando recordé lo que había leído en el foro, del hueveo en las duchas de una cadena de gimnasios que se dicen «smart» pero que todavía no entiendo qué tienen de inteligentes.

Una mañana, después del ejercicio, me fui a duchar y dejé entreabierta la puerta como sugerían en el foro, la señal de que uno andaba buscando algo. Frente a mi cubículo se puso alguien que no alcancé a distinguir, y mientras me pasaba el gel, caché que miraba de reojo y también tenía la puerta abierta hasta la mitad.
Me puse nervioso a cagar, y de a poquito fui abriendo más la puerta y él hizo lo mismo. El tipo era de unos 30 años, rapado, barbón y muy tonificado, con pinta de descendiente de árabes. Supongo que dedicaba un día de la semana a ejercitar la corneta porque ese pedazo era monstruoso. Por lo general soy activo, pero ese día igual el poto me anduvo haciendo pucheros.

Empezó a mirarme fijo, muy intenso, mientras se pasaba el jabón por el pico y se pajeaba. Se me puso dura como nunca, y empecé a hacer lo mismo. Miró hacia los costados, vino hasta mi ducha y nos comimos. El loco besaba súper apasionado, se notaba la experiencia, y habría que recompensarlo.

Seguimos pajeándonos en la ducha, a mano cambiada a ratos, hasta que le avisé que me iba a venir. Él hizo lo mismo y me echó todo en el abdomen, se despidió de beso y entró de nuevo a su cubículo, cerrando la puerta.

Cuando me terminé de limpiar y salí ya se había ido. La experiencia me dejó prendido a cagar y desde ese día empecé a ir más seguido al gimnasio, ahora en la mañana y en la tarde. Supongo que lo caliente a veces trae ventajas para el físico y la salud.