¿Qué sabes de cordillera?

Este es mi primer relato, siempre había tenido ganas de compartir algunas incidencias pero no había tenido la oportunidad de hacerlo, es un poco largo, pero vale la pena leerlo.

Soy enfermero, tengo 25 años y muchas experiencias sexoafectivas (más sexuales que afectivas la mayoría). Alguna involucran compañeros de U, guías de prácticas e incluso más de una vez con pacientes, hay que dar un buen servicio…

Este relato sucedió en febrero 2021 cuando la pandemia estaba dando algo de tregua en el sector donde trabajaba, un pueblo rural en plena cordillera, los fines de semana me correspondía ir a trabajar a una posta de salud aún más alejada de la civilización, lo cual me gustaba porque me relajaba y realmente el trabajo era prácticamente nulo, pasaba el día viendo series o películas, leyendo e incluso durmiendo, todos los fines de semana abría Grindr con la esperanza de encontrar a alguien, pero los perfiles más cercanos estaban a 35-40 km, hasta que un fin de semana me aparecía un perfil a 600 mts, con algo de miedo y curiosidad le hablé, me respondió casi al instante, después sabría que estaba tanto o más ansioso que yo.

A todo esto, soy de contextura gruesa, mido 1,70, cabello oscuro, algo velludo y generalmente soy activo, el personaje en cuestión era más alto que yo 1,75 aprox un poco más delgado, piel clara, cabello castaño medianamente largo (lo suficiente para tomarlo del pelo mientras me la mamaba)… Le llamaremos Alex, tenía 23 años.

Después de conversar un rato, intercambiar nudes y calentarnos la sopa mutuamente, me ofreció ir a la cabaña que estaba arrendando, pero yo no podía abandonar el lugar de trabajo, así que le dije que porqué no venía él, a lo que respondió de inmediato que sí, en las fotos que me mandó no se veía claramente su cara y me sorprendí cuando lo vi, era muy lindo! Y me saludó con un beso casi rozando la comisura de mis labios, lo cual me calentó y le indiqué donde lo iba a atender.

Cerré con llave y caminé tras él viendo su culo redondo y parado, me tenía demasiado caliente, al entrar, me tomó por los hombros y me acercó a él primero con cariño y luego con fuerza, sentía sus manos recorrer mi espalda y bajar a mi cintura acercándome a él, comencé a notar como su verga iba creciendo de a poco hasta que no aguanté y bajé para comerla, deben haber sido unos 17 o 18 cms. Pero gruesa y cabezona, lo recosté en la camilla y me propuse darle la mejor mamada de su vida, noté que sus piernas comenzaron a temblar y me dijo que acabaría pero que aún no quería, así que me detuve y comencé a subir por su abdomen, recorrer su pecho y besarlo de nuevo, en eso él toma mi verga y empieza a masajearla por sobre mi pantalón azul de enfermero hasta que le pedí que me chupara, bajó y torpemente se la metió a la boca, estaba algo acelerado y ansioso, mi verga no es muy grande, más bien un tamaño promedio 15 cm pero si es muy gruesa y me rozaba con los dientes cuando me la chupaba, le pedí que lo hiciera con más calma y me dice que era segunda vez que lo hacía por lo que no tenía mucha experiencia, tomé su mano y me llevé su dedo índice a la boca y le dije que hiciera lo mismo con mi verga, primero recorrí desde la base a la punta con mi lengua con calma gimiendo un poco para darle más emoción, luego besé la punta de su dedo varias veces y lo metí cuidando de no tocarlo con los dientes, él hacía lo mismo y se sentía muy rico, estaba enseñándole mis mejores trucos!

Estábamos en eso cuando me pide que me gire y me dice que me quiere comer el culo, yo me había hecho un lavado exprés, pero sin intención de recibir visitas, más bien por higiene solamente, hundió su cara en mis nalgas, recorrió mi hoyito con su lengua primero suave y luego dando algunas mordidas lo que me puso muy caliente, comenzó a jugar con un dedo y luego con 2, yo estaba tan caliente que no noté cuando tenía 3 dedos en mi culo, yo solo gemía de placer y le pedí que me la metiera, se puso el condón, algo de lubricante y comenzó a entrar suavemente, hasta que tuvo la mitad dentro, ahí comenzó con un mete y saca lento que progresivamente fue aumentando su velocidad y entrando más hasta que llegó un momento donde entró toda y yo sentía que me estaba partiendo, el dolor luego desapareció dando paso a un placer que nunca había sentido, él me tomaba del pelo, me sacó la polera de mi uniforme y quedando ambos a torso desnudo, sentía su corazón palpitar como si fuera a salir de su pecho y su cuerpo muy caliente, él me hablaba al oído me decía que le encanta mi culo y que estaba muy apretado. Nos cansamos de estar parados así que él se tendió en el piso y yo me terminé de quitar los pantalones y zapatillas, lo monté mientras el apretaba mis muslos, jamás olvidaré su cara, que me ponía aún más caliente, de repente comenzó a respirar más agitado y yo aumenté la velocidad de mis movimientos y apreté mi culo para que lo sintiera aún más apretado, yo estaba con mi verga a full también y él pasó su lengua por una de sus manos, la tomó y comenzó a masturbarme con rapidez, a los 20 segundos acabamos juntos, él dentro de mi culo y yo una parte en su mano y otra en su pecho y abdomen, nos besamos nuevamente y nos limpiamos, le iba a ofrecer una ducha cuando sonó el timbre.

Me limpié y vestí lo más rápido que pude tratando de disimular mi cara de recién follado, era alguien que iba por una curación de una herida en el brazo por una caída, sería corto pensé yo y podría seguir con lo que había empezado, pero escuché que la puerta del otro lado se abría con cuidado y Alex aprovechando que el paciente le daba la espalda salió con cautela y me guiñó un ojo al irse. Terminé la curación rápido, di las indicaciones y tomé mi celular para hablarle a Alex quien se disculpó por irse así, pero su familia lo llamó que debía irse rápido porque alguien había tenido un accidente, y como el centro asistencial más cercano era donde estaba yo, no tardaron en llegar con una señora adulta mayor que había sufrido una caída, no impresionaba fractura ni tampoco se había golpeado la cabeza, incluso se bajó caminando sola del auto, solo le administré un medicamento para el dolor y otros para la casa, generalmente soy muy cariñoso con los adultos mayores y esa vez no fue la excepción, por lo que estaban muy agradecidos por la atención que le di a la señora, y me invitaron a tomar once con ellos, les comenté que no podía dejar el lugar solo, pero insistieron tanto que les dije que sí, además que me servía para ver a Alex, mala decisión, cada vez que pasaba por su lado sentía su olor a sexo y me calentaba mucho, en una oportunidad cuando nadie miraba me dio un agarrón, no se cómo aguanté las ganas de besarlo, pero lo hice.

Luego de un rato les dije que debía irme porque el lugar no podía estar mucho rato solo, a lo que me dijeron que como me iba a ir caminando si Alex me podía ir a dejar, asentí con gusto, subimos al auto y a penas nos perdimos de vista comencé a acariciar la verga de Alex mientras manejaba y después bajé a mamarsela con cuidado, cuando íbamos llegando vimos que había gente esperando atención, así que me levanté rápidamente para disimular lo que iba haciendo y finalmente todo terminó con un apretón de manos y un muchas gracias de ambos, que ciertamente, no fueron ni por la atención de su abuela ni por el traslado de vuelta…

Espero que les haya gustado, y poder compartir otras historias, ya que tengo varias bastante atrevidas 😉