No hay como la familia- Parte II: Mi tío incestuoso, ahora conmigo
Hola de nuevo lectores morbosos igual que yo. Primeramente, quiero agradecer por el recibimiento y el apoyo con mi primer relato. Toda esa aceptación me motivó a continuar contando mis experiencias sexuales incestuosas. Vuelvo a aclarar que todo lo que viene a continuación es 100% real por ficticio que suene. Pido disculpas si les parece muy largo el relato, pero me gusta contar los detalles para que todo se entienda.
En el primer relato, conté mi afortunada experiencia de haber presenciado la mejor película porno de mi vida, protagonizada por mi hermano mayor (Alejandro) y mi tío (Carlos). Esa noche no sólo pude disfrutar de como mi tío y hermano culeaban, sino que también logré descubrir que no era la primera vez que lo hacían, y que continuarían haciéndolo. De todos modos, en este relato, uno de los protagonistas soy yo.
Desde esa noche todo cambió en mí. Mis gustos siempre fueron claros: los hombres xd. Sin embargo, ya comencé a ver a mi hermano y tío con otros ojos. Me comenzaron a calentar ambos, aprovechando cada momento de poder verlos en ropa interior (o quizás más si tenía suerte jeje), y todas mis pajas eran con las imágenes que tenía en mi mente de ellos dos y su noche de pasión. Quería volver a presenciar otra de esas mismas escenas, pero en los días siguientes nada pasó, al menos en las noches en la habitación. No obstante, no me cabía duda de que cada vez que salían juntos en el auto de mi tío, pasaban por ahí en algún lugar discreto a desatar su lujuria, pese a que en el día a día actuaran lo más normal posible. Me llenaba de celos saber que pasaba de todo entre ellos y yo no podía ni siquiera verlos. Pese a que mi vida sexual igual era algo activa, pues no faltaba alguien con quien, mi deseo en esos momentos eran claros: culear con mi tío o mi hermano. No me importaba cómo ni en qué rol porque siempre he sido versátil, solo quería desatar mi instinto morboso e incestuoso.
Los días pasaron, y entre pajas y deseos de mi parte, con la morbosidad que siempre me ha caracterizado, comencé a ponerme más osado, dejando atrás el pijama y a pasearme en la habitación solo en bóxer a ver si robaba alguna mirada de ellos, o algo más. Pero nada, todo seguía normal de parte de ellos… claro, si ni soñaban que sabía su secreto. Aprovecho de aclarar que mi cuerpo es muy parecido al de mi hermano, así que soy igual de culón que él… herencia de mi padre.
Por cosas de salud de mi hermano, mis padres, él y mi hermana debían viajar a Valdivia. Se iban por 4 días, y yo me quedaría en mi casa con mi tío. Cuando supe de ese viaje, comencé a armar mi plan: culiar con mi tío Carlos…o chupársela al menos. Era tanta mi calentura que contaba los días para que mis padres y hermanos se fueran, pensando qué hacer para poder lograr mi cometido…y el momento llegó.
Era un jueves de julio cuando mis padres y hermanos partieron. El día transcurrió normal, Carlos haciendo sus cosas (trabajando desde casa) y yo estaba de vacaciones, por lo que luego de cocinar y limpiar, me dedicaba a mirar tele y en la tarde-noche hacía ejercicio, siempre en el living de mi casa, a metros de donde Carlos estaba trabajando. Disimuladamente, para no ser tan evidente, decidí darle la espalda a mi tío, haciendo ejercicios que mostraran el esplendor de mi culo (bien perra igual yo jaja). Si él miraba o no, no lo sabía, pero mi idea era continuar. Fue tanto mi atrevimiento que esperé que él se fuera a la pieza para irme a duchar. Me lavé rápidamente, y con sólo la toalla al rededor de mi cintura me fui a la pieza donde se encontraba mi tío, acostado sobre las frazadas en bóxer y polera. Pese a compartir habitación, siempre fui bien recatado al momento de vestirme, pero ese día me quité la toalla y quedé completamente desnudo enfrente de Carlos, terminando de secar mis piernas y culo. Reconozco que en ese instante mi corazón estaba a mil, ni yo creía lo que estaba atreviendome a hacer. De reojo pude ver como él de inmediato desvió la mirada hacia mí y con una risa medio nerviosa me dice:
Carlos: chaaa y voh, desde cuándo tan exhibicionista?
Yo: (muy nervioso y sin dejar de resfregar la toalla por mi culo) nah, es que olvidé llevar mi ropa. Y qué tanto taparme si estás tú nomas acá.
Carlos: (sin dejar de mirarme) no si no hay drama, sólo que nunca te había visto así, como siempre te andai’ escondiendo pa’ vestirte.
Yo: (tomando mi bóxer de la cómoda) ah, puta sorry jaja, me visto al tiro entonces.
Carlos: jajaja ya wn, si te estoy webiando (dejando su celular al lado, y sentándose en su cama. Mientras yo me ponía el bóxer y la polera).
Luego de este pequeño diálogo (que me tenía entre caliente y nervioso), procedí a apagar la luz y subir a mi cama a dormir. Siempre he sido friolento, y julio en el sur de Chile es muy helado, aunque en ese momento lo que menos me importaba era el frío. Me tenía loco pensar que estaba solo con Carlos en mi casa, tenía a menos de un metro ese pico exquisito que se comía mi hermano y yo igual quería lo mismo. Como no podía dormir, comencé a moverme harto en la cama, cosa que Carlos notó y me preguntó:
Carlos: estai’ bien Toti? (así me dicen mis familiares y cercanos)
Yo: (aún nervioso y pensando en qué decir) eh sí…sólo que tengo mucho frío.
Carlos: pero si te acostaste sin pijama po, y voh erí’ más friolento.
Yo: jajaja sí es que la wea la lavé muy tarde y no alcanzó a secar.
Carlos: puta que lata. Igual está demasiado helado hoy, yo igual tengo frío.
Yo: (pensando: calentémonos juntos, guachito) sí, la cagó. Yo no sé cómo tú y mi hermano duermen sin pijama, wn.
Carlos: nunca me han gustado esas weas, si fuera por mí, dormiría en pelotas.
Yo: (más caliente aún con ese comentario que hizo que mi pico empezara a despertar) jajaja wena po. Nah, yo así ya estoy cagao de frío.
Carlos: oye pero ven acá po, y cuando tomes calor vuelves a tu cama…digo, si no te molesta.
Yo: (sin creer lo que había escuchado, más nervioso que la chucha, con el corazón y el pico a mil) en serio? Yapo.
Acto seguido, sin pensarlo dos veces, prácticamente, salté de mi cama para pasar a la de Carlos (bajando de espaldas de mi cama para que no se me vea la erección con la luz de la calle). Me acosté de inmediato, dándole la espalda para evitar que con algún movimiento mi pico choque con él. Era extraño lo que sentía, quería que mi tío supiera que deseaba ser culeado por él, pero también me daba miedo ser tan evidente. Debido a que la cama era de 1 plaza, el roce de nuestros cuerpos fue inevitable. Sin embargo, en cuanto mi culo rozó con la pierna izquierda de Carlos, este se dio la vuelta quedando ambos de espaldas. En ese momento imaginé que nada iba a pasar, que mi plan se había ido a la chucha. Entre mi frustración y el calor que de la cama de Carlos, me quedé dormido…
Desperté unas horas después por los ronquidos de mi tío, además, el roce que sentía con su cuerpo era diferente, así que imaginé que estaba boca arriba. Tratando de no despertarlo, me moví para cambiarme de posición, primero boca arriba y luego hacía al lado contrario al que estaba, quedando a centímetros de su cara. Mis deseos por poseer a ese hombre eran tantos, que despertó mi lado más morboso, y la idea más loca que había tenido hasta el momento llegó a mi cabeza. Si no podía tirar con él, al menos iba a intentar tocarlo, con eso me conformaba. Pensar en que podía lograr tener contacto con su pico (aunque sea flácido y sobre su bóxer) me dejaba algo satisfecho…así que, comencé. Lentamente fui moviendo mi mano derecha hasta llegar a su cuerpo. Lo primero que toqué fue el lado exterior de su pierna izquierda. El corazón estaba a punto de salir de mi pecho, y mi pico estaba más que duro y mojado dentro de mis bóxers. Continué moviendo mi mano (con la respiración entrecortada y tiritando) hasta que toqué algo que inferí que era su bóxer. Con mis lentos movimientos fui subiendo hasta llegar hasta la parte frontal de la pierna, muy cerca de mi mayor objetivo. Me detuve un momento para cerciorarme de que Carlos seguía dormido, y como sus ronquidos me aseguraban que así era, continué. Comencé a mover mis dedos como caminando sobre su pelvis para llegar a mi meta. De pronto sentí el relieve en su ropa interior que me indicaba que había llegado a ese flamante y exquisito pico. Como no podía ver, no sabía que parte de ese pedazo de carne era, así que luego de detenerme unos segundos para recobrar el aliento, y estar seguro que mi tío no había despertado, mis dedos continuaron caminando lentamente sobre esa delicia que parecía interminable. Juro que ese ha sido uno de los momentos más excitantes de mi vida, no podía creer lo que estaba haciendo, pero no me iba a detener. Luego de recorrer un poco más su pico con mis dedos, decidí posar toda mi mano sobre este…se sentía exquisito, caliente, suave y enorme pese a estar flacido. Dejé esa mano inmóvil, y con la otra saqué mi pico que pedía a gritos salir de mi mojado bóxer. Una vez lo tenía afuera, comencé a mover ambas manos suavemente, pajeándome con la izquierda y sobando el paquete de Carlos con la derecha…estaba en el cielo, sentía que quería estallar, pero ahora quería más.
Luego de unos minutos sobando el paquete de Carlos, sus ronquidos me daban a entender que seguía profundamente dormido, y ni se enteraba de lo que estaba haciendo su pervertido sobrino. Era tanta mi calentura, que el miedo se disipó y decidí ser más arriesgado. Dejé de sobarlo y moví mis dedos hasta el pliegue superior de su bóxer. Ahí, comencé a introducir mi dedo índice dentro de su ropa interior, estirando lentamente el elástico que lo mantenía presionado a su cuerpo. Inmediatamente, tuve contacto con su bello púbico que se sentía áspero y frondoso. Luego, con la ayuda de otros dos dedos comencé a bajar esta delgada prenda de ropa para poder sacar ese premio que me esperaba. Sabía que lo que estaba haciendo era algo peligroso, pero Carlos parecía no sentir nada, ni siquiera se movía. Bajé su bóxer lo más que pude, dejando su pico y bolas fuera de este y procedí a tocar esa pichula que tanto deseaba, ahora, sin que nada me estorbara. Podía sentir lo suave de su prepucio y la abundante mota de pelos que lo adornaban, todo me tenía loco de calentura y a punto de acabar, pero adivinen…quería más.
Así fue como mi calentura me llevó a dar un paso aún más arriesgado: meter mi cabeza bajo las frazadas para chuparsela. Yo sabía que eso podía despertarlo, pero ya no me importaba nada, es verdad que cuando uno está caliente, no es racional. Yo sólo quería tener ese pico en mi boca, aunque sea así flácido; así que lo hice, levanté las frazadas y lentamente bajé mi cabeza a la altura de su pico. Es inexplicable lo que sentí en ese momento, el olor que entró por mis narices me puso a mil, ese olor a pico tan característico y rico me dejó loco. No quise perder más tiempo, y sin pensarlo 2 veces saqué mi lengua y con ella recorrí cada centímetro de su pichula de abajo para arriba. Después, con la misma la levanté para ponerla dentro de mi boca. Ay! Ese sabor, era lo máximo (mi tío era alguien bien higiénico, pero por más que uno se lave, el pico siempre tienen un sabor característico, los que mamamos lo sabemos jajaja), el sabor a tula más rico que había probado hasta ese momento. Una vez con esa delicia dentro de mi boca, comencé a mamarla lentamente, haciendo succión para que no se saliera, y tratando de meter la punto da mi lengua en el prepucio para poder sacar el glande (no podía ayudarme con mis manos porque me estaba afirmando sobre la cama). Poco a poco comencé a aumentar la velocidad de mis mamadas (estaba medio ahogado ahí abajo, pero no me importaba), ya no quería ser cuidadoso ni discreto, ni siquiera me detuve a escuchar si Carlos seguía durmiendo. Yo estaba disfrutando de lo que quería hace rato, y no me iba a detener.
Grande fue mi sorpresa cuando después de unos minutos comienzo a sentir que ese pico blando y flácido que introduje en mi boca comenzó a ponerse duro y crecer. En poco rato ya había alcanzado un gran tamaño que me obligaba a poner todo de mi para poder tenerlo entero dentro. Sin embargo, y pese a lo caliente que estaba, volví a mis cabales y me pregunté si esa erección se debía a una reacción involuntaria mientras él seguía durmiendo o simplemente estaba despierto. Ahí me congelé…y me detuve, sacando el pico de mi tío de mi boca y tratando de levantar las frazadas para ver qué pasaba. Cuando logro visualizar su cara (que gracias a la luz de la calle se veía perfectamente) quedé petrificado. Carlos me estaba mirando… con una sonrisa pícara y lujuriosa que se perdió cuando este mordió su labio inferior y me dice:
Carlos: sigue nomas, lo chupai muy rico wn.
Yo: (sin saber qué hacer y algo confundido, tontamente le respondo) csm, te despertaste.
Carlos: (moviendo las frazadas para destaparme…cosa que agradecí, necesitaba respirar) jajaja me desperté cuando sentí que me la estaban chupando, pensé que estaba soñando o que era…
Yo: (con sonrisa picara) o que era quién?
Carlos: (nervioso y tapándose la cara) o que era mi imaginación nomas po. Ya, pero querí’ seguir o te arrepentiste? (Tomando su pico con su mano derecha).
Yo sabía que él pensaba que era mi hermano, y a eso se refería, pero no quise decir nada. Total, que me importaba? En ese momento era yo quien estaba disfrutando de ese pico, en mi casa, los dos solos y, ahora con su consentimiento. No quería romper el momento, sólo lo miré con cara de caliente, tomé su bóxer y le dije:
Yo: déjame sacarte esta wea que me estorba jaja.
Carlos: (levantando su culo para dejarme sacar su bóxer) jajaja sí wn, que está que me corta las weas.
Estaba tan feliz y caliente en ese momento, al fin el deseo que tenía hace días se estaba cumpliendo. Así que solo atiné a acostarme boca abajo entre sus piernas y me puse a mamar como todo un pro. Me la metía completa a la boca dejándola un rato ahí tocando mi garganta, mientras escuchaba los gemidos de Carlos, que sólo decía o más bien gritaba:
Carlos: (con sus manos a los lados, apretando el colchón) oh csm que rico wn!!!! Lo chupai’ muy rico. Sigue, sigue!!!
Y yo seguía xd…metía y sacaba el pico de Carlos de mi boca a distintas velocidades. O succionaba sus testículos mientras le corría una paja, y luego de vuelta a mamar. Cuando le pasé la lengua en el glande, teniendo su pico dentro de mi boca, mi tío se estremeció completamente, y me dice:
Carlos: (aún con sus manos a los lados) erí’ todo un experto tú ah. Está claro que no es tu primera vez.
Yo: (me saco el pico de la boca) y la tuya? Es la primera vez que un mino te la chupa?
Carlos: (un poco desconcertando) mmmm ehh qué crees tú?
Yo: (pajeándolo suavemente) ni idea, pero qué importa. Ojalá no sea la última nomas.
Acto seguido, vuelvo a ponerme ese pedazo de carne a la boca, tomo sus dos manos con las mías y las poso sobre mi cabeza, dándole a entender que ahora el tenía el control de la velocidad y la profundidad de la mamada. Ahí, mi tío se volvió loco, prácticamente me folló la boca. Me empujaba fuerte haciendo que mi garganta abriera paso a su pico. Yo quedaba sin aire, atragantado y con lágrimas corriendo. Carlos era un verdadero macho, y en ese momento lo tenía todo para mí. No nos importaba hacer ruido, puesto que no había nadie que nos escuchara. Así que los gemidos de Carlos eran sin control, no tenía por qué ahogarlos como esa noche cuando se culió a mi hermano. Seguimos así por hartos momentos, reconozco que ya tenía la mandíbula cansada, hasta que Carlos me dice:
Carlos: (mirando fijamente a mi culo sin sacar sus manos de mi cabeza ni su pico de mi boca. Yo aún estaba con bóxer y polera) media raja wn. Supongo que si lo chupai así, ya te la han metido igual, o no?
Yo: (me saco el pico de la boca) supones bien…por qué?
Carlos: (soltando mi cabeza y agarrando su pico con su mano derecha) porque quiero culiarte? Te atreves (mostrándome su enorme tula con la mirada)
Yo: (mirando su pico y mordiendo mi labio inferior) Yo sí me atrevo, y a ti te da?
Carlos: obvio por sobrinito querido…
Continuará…
Bueno lectores morbosos queridos. No quise contar la parte en la que me culea en este relato porque ya está lo suficientemente largo, y quiero dedicarle el espacio necesario a esa experiencia para explicar cada detalle. Lo que sí les adelanto es que pasó, mi tío me culió bien rico. Sólo pido su apoyo y disculpen otra vez si me extiendo mucho.
🔥 ÚNETE A NUESTROS CANALES DE TELEGRAM 🔥
Recibe los mejores relatos directamente en tu celular
IR AL CANAL DE TELEGRAM
No hay comentarios aún. ¡Sé el primero en comentar!