En la clinica

Bueno soy el de “a ciegas” y aquí otra anécdota mamadora.

Esto ocurrió en la ciudad donde vivo. Un dia estaba en la pega y me metí a grindr a hacer la hora porque estaba aburrido y empece a hablar con un perfil de 27 años (yo 25 en ese momento) el cual me contaba que buscaba una perrita bien puta que mamara, durante la conversación enviamos fotos y era un wn flaco de 1.78 aprox, blanquito castaño y bonito. Al principio no quedo muy convencido conmigo ya que parezco hetero y la mayoría de los curiosos buscan fem. pero al seguir hablando se dio cuenta que era una perrita mamadora sumisa en secreto.

Le pregunté si tenia lugar y me dice que esta de paso por unos días trabajando de conserje en una clínica cerca de mi pega que si motivaba tenia una hab desocupada que siempre estaba sola y podríamos hacer algo ahí piola. Yo con mucho miedo la pensé durante toda mi jornada y finalmente la calentura me ganó, al salir le pregunto si puede, me dice que si, me coloco una mascarilla para andar más incógnito y salgo para allá.

Le hable al estar afuera y me hizo entrar por un estacionamiento escondido, nos saludamos y bajamos hacia un piso subterráneo totalmente desolado y medio oscuro, entramos a una sala totalmente oscura, se sentó en una silla y de una me arrodille a jugar con su paquete, lo olía, pasaba mis manos y mi cara como si me acurrucara con su pico. Ahí pude sentir que era gigante, fácil unos 20 cm y gruesa, Obviamente yo feliz le baje todo y comencé a mamar como una perra, jugaba con su cabeza, la lamia, le chupaba todo el tronco, le olía y lamia sus cocos delicioso mientras el gemía y me decía “no se si puedas hacerme venir, me he corrido 3 pajas hoy jajs” a lo que yo seguía y seguía sin parar de tener ese pico exquisito solo para mi. Algo que me encantó es que el me iba guiando para darle la mamada precisa, “eso justo ahí, ahora más suave, ahora pasa tu lengua por ahí… uff eso perrita”, fuera de webeo habremos estado 30 minutos yo ya con la mandíbula acalambrada y en eso me dice que lo hago tan rico que si podré hacerlo acabar, me comenzó a dar la últimas instrucciones “ahora suave desde la cabeza hasta el fondo, así me vengo” y en eso me agarra la cabeza y siento chorros calientes dentro de mi boca, se para y aun con la verga parada me da un beso, me da vuelta, me pone en 4 en una camilla y comienza a puntearme sobre el pantalón lamiendo mi oreja mientras yo full puta le movía el culo mirándolo con cara de caliente, mientras me decia en el odio “eres bien jugueton y putita como me gustan”, hasta que le
Dije que mejor me iba o terminaríamos toda la tarde webeando y nos podían pillar. nos dimos unos buenos besos y me fue a dejar nuevamente al estacionamiento vigilando que nadie nos viera.

Al pasar el tiempo a veces venia y nunca pudimos coordinar denuevo (mas que nada por el miedo mío de ser pillado) y ahora no ha vuelto mas al parecer :/

En fin, tengo varias historias similares con heteros o curiosos que me follan la boca y estoy motivando en contar las anécdotas. Si les gusta podría contar mas, dejare un nick para que sepan cuando soy yo jaja

Atte. Piola con lugar

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4 Comentarios

  • Anónimo
    abril 13, 2025 a las 10:25 pm

    Me gustaría leer la tercera parte del relato, el pichula de oro

  • Anónimo
    abril 13, 2025 a las 11:52 pm

    Yo quiero

  • Anónimo
    abril 15, 2025 a las 11:26 pm

    Hola
    Este es mi correo electrónico: maximogonzalez746@gmail.com

  • Anónimo
    abril 15, 2025 a las 11:26 pm

    Segunda parteeeeeeeeee

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