Disfrutando a mi mejor amigo
Un día como cualquiera decidí ir a tomar unos tragos en un peladero con mi mejor amigo, siempre íbamos con harto copete y algunas cositas para comer para cuando tomábamos más de la cuenta y esa vez no fue la excepción.
Ese día estábamos tomando y quise ir a hacer del 1 en unos arbustos tal como lo hacía siempre, solo que esa vez quise bajar un poco más mis pantalones y boxers para que mi amigo pudiese ver más de lo que veía siempre. Esa vez dejé mis pantalones abajo y volví a su lado para ver su reacción y él inesperadamente quiso tocarme, lo que me excitó muchísimo a pesar de que era justo lo que esperaba. Mientras él me daba unos agarrones demasiado excitantes, yo quise devolverle la mano y lo tocaba mientras me hacía lo que él quería, por lo que en poco tiempo ya tenía su pene erecto en mi mano y lo masturbaba como creía que a él le gustaba. Después de tocarlo mucho y sentir que hacía lo mismo por mí quise mamar su pene pensando que esa era la mejor manera de recompensar el placer que me hacía sentir. Mi amigo respondió con gemidos y gestos de que la mamada que le daba le estaba gustando, porque lo escuchaba gemir y disfrutar cada vez que su pene entraba en mi boca cada vez más mojada y llena de baba. Estando ambos muy ebrios nos dejamos llevar y él antes de eyacular me dijo que quería penetrarme y yo acepté aunque me lo dijera de manera vulgar (me dejai metértela?).
La posición era un poco extraña porque yo con poca experiencia nunca lo había hecho así, pero él se acostó boca arriba en el suelo y yo supe que debía ponerme de cuclillas encima de él dándole la espalda. Antes de sentir su pene adentro vi un flash encendido y era su cel porque al parecer nunca había penetrado a alguien, pero viendo todo y teniendo el pene tan duro y mojado lo puso donde debía y lo empezó a entrar en mi culo, lo que me provocó dolor al hacerlo y sin preguntar de la nada empezó a meterlo y sacarlo hasta que me acostumbré, en poquitos segundos ya sentía su verga hasta el fondo y sus manos en mi cintura. Yo no paraba de sufrir el dolor de esa penetración a la vez que me preguntaba a cada rato si me estaba gustando lo que me hacía, yo le decía que sí porque mi único objetivo era complacerlo y probar su semen, pero eso no pasó y tuve que hacerlo parar porque me dolía mucho el culo cada vez que su pene entraba sin tanta lubricación como me hubiese gustado. Aún así era un pene delgado y largo, ideal para una primera culiadita en el medio de la nada y sin condón. Al decirle eso ya se había hecho de noche y decidimos irnos a comer algo y lo demás es historia para otro relato.
🔥 ÚNETE A NUESTROS CANALES DE TELEGRAM 🔥
Recibe los mejores relatos directamente en tu celular
IR AL CANAL DE TELEGRAM
1 Comentario
Anónimo
febrero 10, 2025 a las 7:55 pmSegunda parteeeeeeeee