Tío borracho

Bueno, les cuento que esta historia pasó el año pasado. Para dar un poco de contexto, mi tío es hermano de mi mamá y es el pilón de ellos, ya que sus hermanos y mi mamá tienen entre 38 y 45 años, pero él tiene 27. Y como yo tengo 21, nos llevamos muy bien y hay mucha confianza. Él es de Monterrey, y como yo ando de aquí para allá, suelo quedarme a veces con él, ya que tiene 3 cuartos en su casa.

Bueno, les cuento que él es hetero y, la verdad, nunca ha dado señales de ser heterocurioso ni nada; por eso me prende más, jijiji. Bueno, ahora él está casado y esperando a su primer hijo; en ese momento, cuando pasó lo que les voy a contar, ya vivía con su ahora esposa. Ya con estos detalles, les contaré.

Bueno, en un fin de semana que me quedé ahí con ellos, el viernes todo normal, pero había un poco de tensión entre mi tío y su ahora esposa. No le di mucha importancia. Ese día por la noche, mi tío me dijo si no quería ir a cenar a unos tacos que solíamos ir seguido. Le dije que sí. Más tarde fuimos, pero yo pensé que iríamos los tres, como siempre, pero solo fuimos yo y él. En camino a los tacos, le pregunté por qué no fue mi tía, y me dijo que estaban algo mal, pero no le di mucha importancia. Y todo normal en los tacos. Ya de regreso a casa, me contó que el problema era porque ella estaba celosa de la jefa de mi tío, pero igual no le di mucha importancia, ya que no me gusta meterme en ese tipo de cosas. Como último detalle, ese día durmieron en cuartos separados y yo en otro.

Bueno, al siguiente día, sábado, mi tío solía llegar a las 3 a casa, pero se hicieron las 9 y no llegó. Le pregunté a su ahora esposa y me dijo que se fue de fiesta con sus amigos. Me empezó a contar que tenían problemas, pero solo la escuché. Más tarde se despidió y se fue a dormir al cuarto principal. Ya muy de madrugada, como a las 2, escuché mucho ruido y salí a ver qué pasaba: era mi tío, muy pero muy borracho. Nunca lo he vuelto a ver así de alcoholizado.

Venía casi cayéndose; lo ayudé a llegar al cuarto y lo acosté en la cama. Él intentaba quitarse la ropa pero no podía, por lo que lo tuve que ayudar y lo dejé en boxer. Y se veía muy bien, la verdad, se me paró, pero no quise ser grosero. Y ya cuando iba para afuera, me decía: «No te vayas, quédate a dormir aquí». Y la verdad, yo pensaba que no pasaría nada. Cabe recalcar que yo traía un pantalón y camisa de pijama. Y como seguía insistiendo, pues me quedé ahí: él boca arriba y yo volteando para un lado de la cama. Y se quedó dormido. Más tarde —la verdad no sé qué hora era— me abraza y me dice al oído: «Yo sabía que ya te urgía un revolcón de los que tanto te gustan». Y me dice: «Jálamela», y me agarra la mano y me la pone en su verga.

Al momento no supe ni cómo reaccionar, ya que yo estaba dormido y me levantó el abrazo y lo que me dijo al oído. Y cuando me agarró la mano y se la puse en la verga, me sorprendí porque mínimo sí eran unos 25 cm. Y pues yo seguí jalándole. Él estaba entre dormido y borracho, y comencé a chuparle, y él solo jadeaba. Me decía: «Métete los dos huevos, como sabes». Y empecé a intentarlo, pero no lo logré. Él seguía jadeando y me dice: «Súbete y goza». La verdad, ahí sí no pensé en hacerlo, pero seguía chupando, desde el ano hasta la punta, y me decía: «Ya súbete».

Y bueno, de tanto que me decía, me convenció. Él solo estaba acostado y yo hacía todo: subía, bajaba, brincaba y de todo. Yo estaba totalmente disfrutando el momento. En eso me dice: «Ya me voy a venir». Y antes de que terminara de decirlo, sentí todo dentro de mí. Entonces me bajé y pensé que habíamos terminado, pero como a los dos minutos me dice: «Síguela chupando, que tengo para otra». Yo no lo podía creer.

Bueno, pues seguí, jiji. Le chupaba de nuevo todo y, ya sin que me lo pidiera, me subí arriba de él, porque yo estaba gozando de verdad. Y sin tocarme, logré venirme solo de brincar sobre él. Pero él seguía, así que no podía parar, y me decía: «Yo sabía que querías». Y me dice el nombre de su esposa (yo ya sospechaba que me estaba confundido por lo borracho y lo que decía, pero hasta que dijo su nombre lo confirmé). Y seguía y seguía, yo de arriba a abajo, y me dice: «Estos, trágatelos». Y me baja y se la empecé a chupar, y me llenó todo de sus grandes chorros de mecos. Ya después se quedó completamente dormido y decidí irme al otro cuarto, donde yo me quedaba. Y no podía dormir de tanta excitación que tenía, así que me la empecé a jalar hasta que terminé.

Al siguiente día por la mañana, mi tía se fue a trabajar, y cuando se levantó mi tío me dijo: «Creo que ya no estamos peleados». Y le dije: «¿Por qué?». Y me dijo: «En la noche me buscó y cogimos espectacular y dormimos juntos». Yo le dije: «¿Seguro? Porque me levanté en la madrugada y ella estaba en su cuarto». Y me dijo: «Sí».

Más tarde me fui, y le mandé mensaje por la noche y le pregunté cómo estaban las cosas. Y me dice: «Pues mejor, pero creo que lo de ayer fue un sueño húmedo, jaja». La verdad, por cómo fueron las cosas y porque lo conozco, sé que nunca se dio cuenta de que fui yo, y jamás lo imaginaría.