El colega tímido y tulón – Parte I

Esta historia pasó…. AYER! Nunca pensé que un tipo como yo, con una relación de hetero los últimos años, tuviese el encuentro con el mas mino de la pega.

Mi nombre es Ignacio… Nacho! 28 años, 1.70 mtrs, maseteado pero rico, culon, macho, varonil. Hace 3 meses que me tuve que venir al sur por un proyecto de una hidroeléctrica nueva que estamos renovando, en el campo, en un valle en las montañas. Todo Santiaguino queda encantado con el sur, esperando que sea una larga experiencia para olvidar a la “esta”, mi última relación con una mina, que terminó super mal. He tenido muchas minas a lo largo de la vida, todas guapas, pero creo que tengo dudas con mi sexualidad, especialmente cuando sueño con minos. Claro, es lógico dudar después de irme cortao en un sueño por un mino, jaja.

Acá en el sur, todo es bonito, mucha lluvia con esto del supuesto ciclón. En fin, soy jefe de un área, ingeniero, y cuando llegué me presentaron a mi equipo. 5 trabajadores, entre ellos un dibujante técnico, que estaba terminando un proyecto en otra ciudad y se uniría. Buena onda entre todos y todas, equipo bien humano, todos lejos de casa, uno se hace más humano cuando extraña a los suyos.

Hace un mes llegó él, nombre “Edu”, 1,80, delgado pero espalda ancha, una pinta de zorrón que no se la puede, cara cuadrada, mentón sobresaliente, barba de 3 días, pecas, ojos pardo, el loco super mino! Pero mino! Me puse nervioso de puro mirarlo el primer día. Él es el jefe de bodega, 32 años, serio, callado, tímido, nervioso, demasiado tierno.

Todo comenzó cuando un día entré a su oficina, en un día de mucha lluvia, oscuro y con viento. Lo observé escuchando música, cantando, moviendo las manos como tocando una batería. Estaba escuchando rock, hiphop, neumetal, de todo un poco. Se veía super macho. Le dije que era buena música, y le pregunté por sus gustos. Iniciamos una buena conversa. Le dije que lo invitaba a tomar una chela saliendo. Se negó. Toda mi vida he sido amigo de tipos como él, bien pa’ entro. Quizás porque soy una cotorra culia. Hablo todo el día y los tímidos me escuchan jajaja. Pero a la vez soy bueno para escuchar.

Pasaron los días y a la tercera invitación me rendí, no pescaba. En fin, yo solo quería demostrar buena onda, nada mas. O sea, lo encontraba macho y rico, varonil, pero nunca ando buscando nada con un mino. Pero me cayó bien como amigo. Después del tercer rechazo, pensé que se daba color, y chao, no lo pesqué nada. Hasta que hace como 2 semanas fue a mi oficina:

Ignacio, ¿qué haces hoy? – Me pregunta.

Mmmm quiero salir a trotar en la noche con la lluvia, a parte de eso, nada, es miércoles.

¿Te tinca ir a tomar una chela? – Me ofrece.

Mish, buena, hasta que te animaste, espérame y le digo al resto. – Soy muy sociable.

No, no, no… porfa no, vamos los dos nomas, así conversamos un rato.

Vale, ni un atao.

Pero porfa perro, los dos.

Ok, tranqui.

¿Por qué quería que fueramos los dos? ¿Estaba triste? ¿Quería algo mas? Naaaaaaaaaaa. Rollos míos, este es demasiado macho y rockero como para dar jugo. Además, me cae bien.

Salimos a la tarde, lo pasé a buscar caminando a su pensión. Fuimos a un bar, muy piola, comimos rico. Sonaba rock en el bar, entre chileno y gringo, conversamos caleta, cantó varias canciones, nos reímos harto:

Sorry por no aceptar tus invitaciones antes, y gracias por hacerlas. – Me dijo.

Naaa, buena onda, me tincabay piola, por eso te invité.

Tu igual –esconde la mirada- eres buena onda, buen encargado de área, amable, pero soy demasiado tímido, me da lata estar con mucha gente, y las invitaciones eran de 5 o 6, además varios me caen como las weas – dice diciéndolo muy avergonzado.

Jajajaja tranqui perro, me caes bien, eres bueno pa’ la pega, además estamos todos lejos de casa, y por eso las invitaciones, pero si quieres salir con menos gente, o simplemente los dos, dime nomas y apaño!

Se nota que eres buen amigo – me dice.

Y conversamos de la vida. Nos agregamos a Instagram. Tomamos harto. Ya medios mareados nos fuimos y lo pasé a dejar a su casa. Cuando llegué, me despedí y le di un abrazo. Al abrazarlo, quedé dao vuelta: es mas alto, por lo que lo abracé por debajo de los brazos, me apretó caleta, puso su cabeza en mi hombro (que tierno), sentí su olor a perfume rico, él me apretaba mas aún, bajé un poco mis brazos y sentí todo su torzo y espalda musculosa, y rozó un poco su verga, la tenía erecta (después caché que la tenía flacida, es que tiene el medio pico jajaja).

Lo dejé y me despedí. Esa noche le dediqué mi primera paja. Qué manera de calentarme. Al otro día, en la pega, todo seguió normal, la diferencia es que lo miraba todo el rato que podía: usaba un chaleco como gastado, una bandana en el pelo, más su barba, pantalones semi informales pero ajustados, medias piernas, buen culo… Me fui a pajear en el baño.

Un día fue al baño, y … lo seguí! Llegué a su lado en los urinarios y nos pusimos a conversar. Él mira hacia afuera, porque alguien gritó, y aproveché de verle la verga: WTF! ENORME, GRUESA Y OSCURA. Se dió vuelta, miré pal otro lado, me sacudí y me fui nervioso. Tiritando. Nunca había visto una así, y eso que he visto varias vergas (solo de curioso, obvio, tenía mina).

Al rato llegó y me avergoncé, me puse rojo y le desvié la mirada.

¿Estás bien? – Preguntó.

Oh sí, claro, solo algo cansado, estresado.

Vamos por unas chelas después.

No sé, no creo – le dije, tenía que ir a un trámite. Además, realmente me dejó pa’ dentro, ¿es natural tanto pico?

Vamos, yo te invito esta vez, ando con ganas de webear.

Hoy no puedo, puedo mañana en la tarde.

Ya, agéndalo – me dijo.

Esta conversación pasó antes de ayer.

En la noche, no podía dormir, ¿cómo alguien puede ser tan rico, tan tierno, con tanto estilo, tan alto, buenas piernas, guapo, apapachable…y a la vez tener el medio pico? La naturaleza es injusta.

Me pegué senda paja pensando en él, busqué sus fotos, su instagram. ¡Mas encima es bueno para sacar fotos! Unos paisajes increíbles, tomas de cosas simples, del día a día, con canciones de rock, de metal, mucho flow, mucho estilo. ¡El bastardo dibuja super bien! Es un artista, perdiendo su vida en una oficina. A mi me gusta mi pega, pero él… su enfoque es otro. Sentía como el hoyo me palpitaba mientras me pajeaba pensando en él.

Después de senda paja que me mandé, le fui a ver a quienes seguía en Insta… encontré dos Instagram de minas, varias fotógrafas minas, bien guapas. “Era, ya fue”- pensé – “seguirá como recuerdo en mis pajas”. Le encontré unas fotos sin polera PUTA EL WEON MINO! Me pegué 3 pajas viendo sus fotos. De verdad que sus hombros, sus pectorales, sus piernas, su cara, rico el mino.

Suena el despertador a las 7 am (esto fue ayer, el día…), no podía creerlo, dormí 1 hora, solo pajeandome pensando en él. Llegué hecho pico a la pega, me hice un café y me pasa a saludar el Edu: camisa a cuadros negra con blanca, jeans con botones en vez de cierre (que hot), chaleco arremangado, se le veía la tula pa la derecha (soy detallista).

A las 3 no podía del sueño, ojeras de medio metro y estaba hasta tiritando por no dormir. Le dije a mi ayudante que me iba a la casa, que me sentía mal. A las 4 me llega un WhatsApp:

Oiga perrito, se fue, ¿qué le pasó? – Me preguntó

Dormí pésimo, algo me cayó mal, me siento mal – mentí.

Chucha, descansa, obvio, te hablaba porque íbamos a salir hoy a tomar.

¡MIERDA! Había olvidado ese gran detalle, con las ganas que le tenía, quería solo abrazarlo y sentir su cuerpo de macho y su perfume. Y conversar, y reír, puta el mino mino. Y nada de zorrón, es solo su pará de tímido. Con gente, no habla, respuestas cortas, monosilábico. Cuando estamos los dos, loco simpático, muy chistoso, irónico, siempre anda riendo, pelando, puteando el mundo. Es de un pueblo de la región de al lado, su familia del campo, sus hermanos igual. Le ha costado ene salir de ese mundo. Pero se esfuerza. Tuvo una pésima relación con una mina y está soltero.

No te preocupes, te paso a ver a la salida de la pega, y te llevo algo para que te animes. – Me siguió escribiendo por WhatsApp. ¡Puta el loco lindo!

No tranqui, solo quiero descansar – (¡Qué chucha hago, que venga!) Me dormí.

A las 6.30 siento el timbre de la casa donde me alojo (soy jefe, tengo privilegios jaja). Llovía torrencialmente, viento, truenos, venía todo mojado con una bolsa:

Te traje pastelitos, pan, jamón, y esto – me dice, y saca un chocolate. (¡Loco lindo, por la cresta! SE LO CHUPO, LO DEJO SECO, SE LO MERECE, ¿me apoyan?).

No tenías porq…

Oye, que está helada la casa – ya que no había prendido la estufa, porque obvio, estaba cansado. – Anda a acostarte y te cocino algo, después de prender la estufa – Me dice.

Me negué, pero me obligó, me metió él a la cama. Mi corazón palpitaba a mil, tenía todo el pico mokeado. Pero en el fondo si estaba enfermo, mucho frío, tiritaba. Me dormí.

Me desperté por el calor de la estufa, salí al living y me dijo:

Que bueno que despertaste, te tengo sopa, pero anda a la pieza y te la llevo.- Le dije que no, que comiéramos en la mesa. Puso Deftones de fondo. Cantaba. Sopa en la mesa, rica. – “Receta de mi hermana, no sé cocinar, pero me explicó paso a paso”- me dijo. ME COCINÓ, ¿QUIERE QUE LE DE UN HIJO?. Conversamos, me dio de comer…

Cuando terminé de comer, me llevó a la pieza. Me obligó a acostarme. “Lavo la loza, te dejo un te y me voy” me dice. Quedé mirando el techo, tenía los pies muy helado, mucha lluvia y viento. Cuando vino de nuevo, me dice:

¿Cómo te sientes?

Raro, como que tirito, los pies helado, no se, raro.

Deja ver tu frente – me apoya la mano – ¡Estás muy helado! Que raro tu resfrió – (Si, claro, resfrío, pensé jajaja) – y se saca el polerón y me dice – ¿me puedo acostar al lado tuyo hasta que te mejores? – NERVIOS.

Si claro, dale. – Le digo muy frío, desganado.

Solo quedó la luz de la lámpara, sonaba M84 de fondo en el celu. Afuera con lluvia, truenos, el silencio del sur, árboles moviéndose con desesperación (¿La naturaleza quiere que follemos?):

No se si irme realmente – me dice y mi corazón empieza a palpitar super fuerte- porque está lloviendo muy fuerte y tu estás enfermo, ¿si empeoras? – me dice eso sonriendo muy cachondamente.

Nopo, no puedes irte, hace mucho frío y lluvia, maldito ciclón, quédate, demás mañana amanezco mejor y te llevo en la camioneta a tu casa, te camb…

Ya vale, pero ¿dónde duermo? – Gran detalle, tengo una cama de dos plazas, ¿en el sillón?

Emmmm – Murmuro, mientras pienso en como meterlo a mi cama y sentir ese pico gigante.

Correte para allá y dormimos juntos, como amigos, obvio, pero si querí correrme mano no me enojo, jajaja. – HELADO QUEDÉ!

Me arrinconé, se sacó el jeans, quedó en boxer. Eran negros, buenas piernas, demasiado buenas y se da vuelta, lo miro de reojo, medio paquete, muy grueso. Puertas cerradas, todo apagado, incluyendo la lámpara. Solo la luz de afuera. Me permitía ver su silueta, WEON MINO.

Se acostó, no se acercó mucho, quedó en silencio. Yo, que usualmente hablo harto, estaba en silencio. Me dice:

La última vez que dormí con alguien, fue con mi mina, la X – me dice. Comienza a comentarme de ella, blablabla, no me interesa, me pierdo. Sigue hablando, yo desinteresado. Al rato me dice:

A todo esto, ¿cuánto te mide? – WHATS, a pito de que hace esa pregunta – Por que a mi me mide 21 cms – WHATS, ¿y esa información de la nada? 21 CMS, O SEA, PONGALE MAS HOJAS AL PASAPORTE A ESA BESTIA!

¿Cómo llegamos a esta conversa? Jajaja – Le dije.

Mira el weón penca, te estaba contando que mi mina se quejaba mucho de mi, porque decía que la tenía muy grande.

Ahhh sorry me perdí o quizás me dormí no sé jaja

¿Pero cuánto te mide? Nunca tuve eso de cabro de medírmela con un amigo jajaja así que no se, ¿será demasiado chica? – Pregunta.

No, está bien.

Pero cuánto te mide, relajate.

17 cms – le digo.

Ahhhh, pero eso está bien, ¿o eso es chico? – Me pregunta, con voz curioso.

Depende, pero 17 es un promedio bueno, depende de la forma de tu pico, el ancho, etc.

¿Cómo sabes tanto de picos? – Maldito, me atrapó (Atrapadaaaa, ayuda, ayuda jajaj)

Pero es educación sexual básica, o sea, todos medimos nuestras vergas con amigos poh, onda, ¿te saltaste la adolescencia? Jajajaja mira, el zorrón, el mino, se saltó etapas.

Chucha, sorry, pero no se me había ocurrido antes, solo pensando en minas – TATE, esta es la mía.

¡Pero comparemos! – le dije, sin miedo al éxito.

Se destapa, prende la lámpara, se acuesta y se comienza de a poco a bajar el bóxer. NO LO PODÍA CREER. Me dice “Yapo, dale también”. Quedé helado. Se baja el bóxer negro, se le notaba las calugas del cuerpo en la polera, piernas anchas, peludas, suena The smashing pumpkins en el celu. Se baja el bóxer, el pene era hermoso, no estaba erecto (¿no lo caliento?), y se da vuelta: una especie de 69, para mirar las vergas. Queda con su pico frente al mío. Voy, me bajo el bóxer un poco, lo toma con sus manos, me lo baja. Estaba goteando hace rato, mi pene estaba durísimo. Su bestia se comienza a erectar. Es igual al de la foto (pero con las piernas mas anchas, mas pelo, mas calugas):

¿Puedo tocar? – Me dice.

Dale, lo que quieras.

Jajaja, no te ofrezcas tanto, es solo para comparar, nada mas – Me mató las ilusiones, pero filo, era el pico mas grande que había visto.

Acerca sus manos a mi pene. Lo toma, lo da vuelta, lo mira, LO HUELE, jajaja. Era un niño con juguete nuevo. Toma de mi moco con sus dedos y lo estira, lo mira entusiasmado, riendo. Un cabro chico con juguete nuevo.

El mío mide 17 cm, recto, cabezón, soy moreno pero mi verga es blanca, la cabeza es rosada. Él Edu es blanco de piel (Y RICO), pero su verga es curiosamente oscura, MUY GRUESA, muy cabezona, y con 2 venas que se le remarcan en su tronco. Lo tomo con mis manos, me pongo más nervioso y me pongo muy helado (pero caliente por dentro). Le bajo el cuerito, estaba seco su pico, pero erecto. Quizás seco porque no se calentó. No sé, rollos míos.

Tienes bonito pene, lo había visto en pornos, pero nunca en vivo – Me dijo – Es grande, debes complacer caleta a tus minas.

Jajaja naaaa, piola, todo humilde y sencillo por mi parte. Pero tu, tienes buen pico.

No sirve de nada si no lo ocupo – En esos nos miramos y nos cagamos de la risa.

Se da vuelta, se sube el bóxer y me dice – Ya durmamos – Se acuesta en la cama bien derecho, con las sábanas . Apaga la lámpara – ¿Te puedo abrazar? – Me dice – Extraño tener un amigo, hace tiempo no compartía así, porfa. – Loco tierno. Quiere un amigo, pensé. Sentí su voz de macho tierno, como sufriendo.

Ok, pero hay un problema, yo duermo desnudo – Le dije. Ya caliente y decidido, quería ese pico en mi. Pero, ¿si me destroza? Pienso. Pero nunca he estado con un hombre, no se que hacer, ¿qué hago? ¡Guíenme!

Es tu cama, haz lo que quieras – me dice – pero no te pases rollos, si te punteo es porque estoy durmiendo, nada mas.

Tranqui, durmamos.

Suena la lluvia, viento, de a poco me duermo… Despierto como a las … ni idea, pero era de noche aun. El Edu me tenía abrazado, estábamos en cucharita, yo desnudo, y él CON EL BOXER ABAJO! Tenía su verga flácida, entre mi culito (que cabe destacar, tengo buenos panes jajaja, es grande, redondo, fibroso). NO LO PODÍA CREER! ¿Qué hago? ¿Me muevo? Me dio miedo. Porque si me lo mete, y me destroza, ¿qué hago? Son 21 cms. Dormía plácidamente, me respiraba en la nuca. En una me abrazó super fuerte y sentí más su verga. Yo estaba que reventaba. En eso, sentí que me venía cortado ¡ES EN SERIO!????? Me fui cortado en las sábanas. Me levanté, fui al baño a limpiarme.

Cuando llego, estaba despierto:

¿Qué te pasó? ¿Te hice algo?

No nada, – le dije- ¿por qué?

Por que las sábanas están mojadas.

Se me cayó la taza de té que me trajiste, duerme nomas.

NO PUEDO CREER LO QUE PASÓ DESPUÉS!