Lo que me pasó en el Servicio Militar

Cuando me tocó irme para el SM fue un trauma. Siempre escuché lo mal que lo pasaban quienes tenían inclinaciones gays. Mis padres no sabían que me gustaban los chicos. Siempre había tenido pololas, incluso, algunas fueron a mi casa a cenar y amanecían conmigo y aquello mis padres lo sabían, pero al final, me estaba culiando a un amigo mío con el que veníamos juntos desde hace tiempo. Él igual que yo, tenía sus pololas, pero nada se notaba, éramos masculinos pero en la intimidad, nos dábamos pico los dos.

Llegó el día de irme, me tocaba partir, siempre había oído que era terrible ese lugar. Por suerte, mi primo se fue conmigo en el mismo “llamado”, pero él no sabía lo mío. Él o yo siempre hemos sido muy unidos pero jamás le había comentado nada. Cuando llegamos a la unidad nos recibieron los oficiales que nos estarían haciendo la vida imposible. Pero no quedaba de otra. Desde el primer día empecé a mirar a quienes dormiría en el albergue. Habían unos chicos que estaban fuera de forma con los cuerpos, pero casi todos hacían gym. Yo en mi vida había pisado un gym aunque no tenía el cuerpo mal. Entre el grupo, había un sargento que no me quitaba la vista. Ya empecé a imaginar que algo iba a pasar.

Irme a bañar todos los días era un calvario: ver a todos aquellos hombres bañándose desnudos, algunos con el pico que daba deseos de mamarlo, otros se ponían a decirse cosas del pico y yo sin decir una palabra. A veces, esperaba al final, antes de dormir para bañarme.

Uno de esos días yendo a bañarme escucho unos gemidos y entro buscando de donde venía. Era el sargento que tenía a uno mamándosela en la última ducha!. Yo me quedé como una piedra, igual tenía el pico como piedra. Ellos no se imaginaban que yo estaba ahí. Me puse a hacerme una paja oyendo aquello! Tanto fue el éxtasis que no sentí cuando ellos acabaron y se fueron! Yo me vine como un perro, hacía dos semanas que no culiaba, tenía la leche acumulada! Me metí a bañar y cuando me iba, el sargento estaba mirándome desde el otro lado de las duchas! Me quise morir, pero de igual manera actué como si nada.

El tipo se lanzó encima de mi y me dijo: estabas mirando cuando me la estaban mamando? Dime la verdad o te mato aquí mismo! Ahí mismo le dije que no, que yo había entrado y no había nadie. Me miró el pene y me dijo: en quien estabas pensando que la tienes dura?. Y en ese momento me la agarró! Enseguida le dije: si quieres que te la mame, yo te la chupo pero no me hagas nada!. Ni había acabado de decir aquello cuando se sacó la verga y me obligó a mamársela! Le media como 19 cm, llena de venas, una cabeza casi perfecta!. Yo estaba en las nubes, que rica se sentía eso en mi boca!. En un momento me quitó su pico y me dijo: para que me vas a sacar la leche! Lo menos que me iba a imaginar es que el sargento se agachó a mamármela y me dijo: de esto a nadie que te mato! Estuvo mamando como 10 min y cuando me sentía que me iba a venir él paraba!

Se puso de pie y me dijo: date vuelta culiao que te la voy a meter! Me mamó el culo y mientras me lo mamaba me iba metiendo los dedos. Cuando ya me cabían 3 dedos me la empezó a meter: a pesar de todo, fue despacio: cuando sentí que la cabeza entró, yo mismo empujé y entró completa! Ahí mismo empezó a metérmela, primero suave y después que ya estaba dilatado aquello iba más rápido! Me tapó la boca y me dijo: cállate puta que nos van a oír! Estuvo metiéndomelo firme y parejo como por 15 minutos y en un momento me dijo que se iba a venir y quería dármela adentro! Yo no quería pero me agarró por los hombros y me la echó adentro!. Después me hizo una paja y me dijo: tíramela en el pecho!. Me había venido dos veces en menos de media hora!.

Aquello de repitió varias veces cuando me tocaba la guardia! De momento me convertí en la puta del sargento. Gracias a eso tuve pases a la casa más veces que nadie!. Hasta un día que me encontré al jefe de la unidad dándole… al SARGENTO! Pero eso es otra historia que después les contaré!