Compañeritos de colegio

Con un compañero de básica nos empezamos a seguir por Instagram y a conversar, recordando los tiempos del colegio y hablando de algunos profesores. Con el tiempo, el chat se volvió más coqueto, nos mandábamos algunas fotos, mensajes en doble sentido y así. Si bien había cierto coqueteo, nunca pasó a más hasta este Año Nuevo.

Eran como de las 2 de la mañana; no tenía planes y, justo en ese momento, él me escribió para desearme un feliz año, acompañado de un “avisa y te robo”. Eso me prendió y dije esta es la oportunidad. Después de intercambiar algunos mensajes coordinamos y pasó a buscarme en su auto.

Me llevó a una cabaña retirada de la ciudad. Durante el trayecto, aunque estaba bastante ansioso, hablamos de cosas triviales hasta que llegamos. Comenzamos a besarnos apasionadamente, a tocarnos y a desnudarnos. Nunca imaginé que tendría a ese compañerito encima mío mientras le quitaba el bóxer para comerle el pico. Estábamos tan calientes rozando nuestros cuerpos, masturbándonos; yo solo deseaba que me culiara. De repente, me dijo que tenía popper. Lo sacó y aspiramos; fue la sensación más rica del mundo. Nos pusimos a mil; solo quería devorarlo y que me diera con todo, el me comía el culito con muchas ganas y eso me prendía caleta, también yo le mamaba bien profundo. Estuvimos jugueteando un rato hasta que se puso condón, un poco de lubricante y comenzó a penetrarme. Estaba tan excitado, tan caliente, era perfecto, su pico muy rico entrando y saliendo de mi culito mientras gemiamos y nos decíamos lo rico que estaba. Así estuvimos un buen rato, me ponía de perrito, patitas al hombro, hasta que me subí sobre él y comencé a cabalgarlo con todo, me encanto estar asi, viéndole su cara de excitación mientras me comía su pico como si no hubiera mañana.
Estaba tan excitado que después de un rato acabe sobre su pecho y lo llene de leche.

Después nos vestimos y salimos a mirar las estrellas. Ya había pasado mucho rato así que me llevó de regreso a casa; llegamos alrededor de las 5:30.

Nunca imaginé que terminaría así con este compañerito; fue muy rico y caliente.