Mi segunda vez con un hombre

Hola de nuevo, tantas pajas sin leernos.

En el relato anterior olvidé de mencionar mi nombre, bueno me presento soy Gabriel, como dije soy alto flaco y vergón, ojos verdes y algo castaño.

Cómo mencioné en el relato anterior, fue mi primera vez con un mino, luego de que en el call me comí a casi la mitad de la minas tanto chilenas como extranjeras, bueno en este relato les comentaré como sigue la historia con Javier.

Después de esa exquisita experiencia dónde me entró el bichito de experimentar con un culito de hombre, Javier me invitó luego de convencerme de ir a su depto para conversar sobre lo que pasó, conversa y conversa y recordando lo que me hizo se me paró el pico de una manera que no disimulaba nada (de hecho solo fui con jean sin boxer), él notó mi erección y me dijo si quería repetir, le dije que sí, se agacha y me abrió el jean, mi pico salta lo cual admira ya quee dice que es muy lindo, empieza a tocarlo con sus labios, lo recorría de la punta del pico hasta los cocos, me hizo cosas que jamás una mina me lo había hecho, todo para mi era nuevo y exquisito, me cuesta irme así que estuvo varios minutos chupándomelo y me dice que quiere que se lo meta de nuevo, pero está vez tomé yo el mando y le empecé a besar todo el cuerpo y su culo como si fuera una vagina, sé que son sensaciones muy diferentes pero es lo que sabía, luego aprendí muchas cosas más, pero eso será en otra historia.

Recorriendo entero su cuerpo y ya su culo dilatado lo acuesto de espalda en la cama, abriendo sus piernas y dejando su hoyo a mi disposición, le pongo el pico en su entrada donde los suspiros no dejaron de aparecer, de tanto lamerle el culo mi cabeza empezó a entrar fácilmente donde los quejidos me excitaban, más nunca pensé que esos quejidos me hicieran metérsela de una y pega un grito de dolor, me asusté porque la última vez así él lo hizo, se sentó sin pensarlo, me dice que me quede quieto para que se acostumbre al porte, empiezo con el vaivén, coloca sus pies en mi espalda baja y nos besamos apasionadamente, mis embestidas eran brutales, él gemía como una perra en celo, con esos bramidos noté que mi pico se ponía más duro y le entraba todo, solo faltó que le meta los cocos, luego de varios minutos pongo mis manos en su culo abrazándolo para embestirlo más fuerte, le digo que ya me voy ir cortao, me separo de su pecho y se empieza a pajear para acabar juntos, por mi sensación de acabar y mis quejidos noté que acabaría pronto, no aguanté y acabe tan rico, sus buenos chorros de leche en su culo y él sintiendo mi leche calientita en su interior, tras lo cual él acabó varios chorros en su guata.

La sensación de acabar de esa manera y experimentar nuevas sensaciones fue genial, ambos quedamos exhaustos en la cama y nos besamos nuevamente, me separo lentamente sacando mi pico aún algo duro y veo que le empieza a salir mi leche de su culo, no soy tan lechero pero ya habían pasado como 3 días sin actividad.

Nos fuimos a bañar y sacarnos la leche de encima, no sin antes volver a chuparlo debajo de la ducha calientita.

Con Javier seguimos viéndonos igual que con la Natty, ella no sabe que veo a Javier ya que aún sigo culiándomela y a las minas del call, creo que eso nunca lo dejaré pero quiero aprender estar con un hombre. Sé que aún me falta harto por aprender pero hay tiempo.

Espero que les haya gustado este relato, tengo varios con minos del call que me presentó Javier pero eso es otra historia.

Salu2